Castilla y León es la segunda comunidad con mayor saldo negativo en movilidad laboral en 2014
Castilla y León fue en 2014 la segunda comunidad autónoma española con mayor saldo negativo en movilidad laboral, solo por detrás de Andalucía, al hacer las maletas 3.728 trabajadores más de los que optaron por cambiar su residencia a la región. Un informe de la Agencia Tributaria, al que ha tenido acceso la Agencia Ical, concluye que 8.906 castellanos y leoneses salieron de la Comunidad por motivos laborales, lo que supone la cifra más alta en los últimos tres años y un 6 por ciento más que en 2013. Por contra, la región acogió a 5.178 trabajadores de otros territorios.
Un total de 95.436 empleados en España dejó su región de origen en busca de otro trabajo, lo que supone un 5 por ciento más que en 2013. De ese número, el 29,3 por ciento fue a parar a Madrid que atrajo a 28.056 personas. Un dato curioso es que 4.450 de ellas procedían de Castilla y León. Es decir que la mitad de los castellanos y leoneses que trabaja fuera de la Comunidad se traslada cada día a Madrid o reside allí por motivos laborales. Solo otra región limítrofe como Castilla-La Mancha (5.789) y Andalucía (5.297) 'exportan' más mano de obra a la capital del país.
Las otras comunidades de destino de los ciudadanos de Castilla y León en 2014 fueron Cataluña (771), Andalucía (525), Valencia (469) y Galicia (449). Los madrileños formaron el grueso de los foráneos que eligieron la región para trabajar, con 1.801, seguido de los andaluces (487), catalanes (435), gallegos (379) y valencianos (335). Por lo tanto, uno de cada tres asalariados venidos de otros territorios procedió de la capital.
Los expertos relacionan el aumento de la movilidad laboral con la mejora de la economía que ha traído consigo un incremento de la contratación. Antes de la crisis podía ser una opción pero ahora se ha convertido en una obligación para muchos españoles. En todo caso, la movilidad laboral ha sido siempre la asignatura pendiente de la sociedad española, que ha sido reacia a cambiar de domicilio.
Cataluña es la segunda comunidad que más asalariados de otros lugares acogió, con 12.621 contribuyentes (13,2 por ciento), seguida de Andalucía con 9.239 nuevos vecinos (9,6 por ciento). Son, junto a Madrid, los territorios con más población y, por tanto, es normal que protagonicen los principales movimientos de mano de obra. De ese modo, Madrid también lideró el año pasado las salidas (17.053), al igual que Andalucía (14.544), Castilla-La Mancha (9.589) y Cataluña (9.488)
Madrid y Cataluña, junto a Baleares, Canarias y Murcia fueron las únicas regiones con un saldo positivo en movilidad laboral ya que hubo más entradas que salidas de trabajadores, según las declaraciones anuales de retenciones en el IRPF entre personas activas que el año anterior eran asalariados. El resto registró más salidas que entradas de asalariados. Andalucía y Castilla y León lideraron, con mucho, el saldo negativo en movilidad laboral puesto que el siguiente en la estadística fue Castilla-La Mancha (-2.430), Galicia (-1.457) y Valencia (-1.319).
La Comunidad es tradicionalmente 'exportadora' de mano de obra. Y es algo que queda patente en las estadísticas de la Agencia Tributaria desde 2007. Bien es cierto que para encontrar un saldo negativo tan alto hay que remontarse a 2009, con un resultado de -4.036. En 2013, la diferencia fue de -3.217, lo que supone 511 menos que el ejercicio pasado.
Los años duros de la crisis económica obligaron al movimiento de personas en busca de un empleo. Por ejemplo, un total de 17.111 castellanos y leoneses hicieron las maletas en 2007 para firmar un contrato en otra comunidad, una cifra similar a la de 2008 (17.614). A partir de entonces, los contribuyentes que salieron de la región bajó de forma progresiva: 2009 (14.659 personas), 2010 (11.189), 2011 (9.566) y 2012 (8.726 contribuyentes).
Cambio para pagar menos impuestos
Los principales motivos para cambiar de residencia suelen ser laborales pero también hay que tener en cuenta las cuestiones puramente fiscales. La España de las autonomías motiva que algunos ciudadanos opten por fijar su residencia fiscal en otra comunidad para pagar menos impuestos. Esto es así porque las autonomías tienen la cesión parcial, o incluso total, de las cuantías recaudadas en los impuestos sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), Patrimonio y Sucesiones y Donaciones (ISD), además de otro tipo de beneficios o deducciones. País Vasco y Navarro no aparecen en el informe de la Agencia Tributaria al contar con sistemas fiscales propios.