Se mantiene la alerta en los ríos Luna, Omaña y Tuerto por el alto caudal

César Sánchez / ICAL La carretera de acceso a la localidad de Toral de Merayo (León), perteneciente al municipio de Ponferrada, continúa cortada debido al desbordamiento del río Boeza

Ical

La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) mantiene a estas horas una decena de ríos en situación de alarma y 13 en alerta, si bien prevé la recuperación de la normalidad en la práctica totalidad de las cabeceras de los ríos, especialmente en los más afectados, como son el Arlanza y el Duero, ante la disminución de las precipitaciones y el descenso de la cota de nieve, según informó el organismo de cuenca en un comunicado recogido por Ical.

Los niveles actuales del tramo del Duero situado aguas abajo del embalse de La Cuerda del Pozo, en Soria, se reducirán paulatinamente a medida que se alcance el volumen de resguardo de la presa con objeto de volver a la normalidad lo antes posible.

En estos momentos, destacan las estaciones en alerta o alarma del río Duero, que refleja el traslado de la onda de la avenida al tramo medio y bajo de este río, en las provincias de Burgos y Valladolid.

Otros ríos que mantienen niveles elevados son el Arlanza en su tramo bajo de las provincias de Burgos y Palencia, el Órbigo en su zona baja y sus afluentes Omaña y Tuerto, en León y Zamora; el Pisuerga, tras la afluencia del Arlanza, el Ucero en Soria y el Támega en Orense, que también pertenece a la cuenca del Duero.

La previsión es que las ondas de las avenidas se desplacen en los casos de los ríos Pisuerga y Duero en sus tramos medios y bajos en los próximos dos o tres días. En el primero de ellos se están alcanzando niveles de alerta en Cabezón y la punta comienza a llegar a Valladolid, donde se mantendrán caudales elevados durante el día de hoy y mañana, con valores que rondarán el nivel de alerta, aunque probablemente no se superen.

Por su parte, la punta de la crecida del Duero se encuentra actualmente en la provincia de Soria y se desplazará a las provincias de Burgos, Valladolid y Zamora con caudales que también pueden alcanzar niveles de alerta o alarma.

Cuenca Miño-Sil

El Sil superó el nivel de alerta a su paso por Matarrosa el pasado viernes, y según los últimos datos aportados por la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS), a las 10h de este lunes, su nivel se encuentra cercano a los 2.50 metros, cuando justo hace una semana apenas alcanzaba los 0,8 metros. El caudal del Sil en este punto se mantiene disparado desde los 9 m3/s del lunes pasado hasta los 170 m3/s que se han podido medir este lunes. El Sil en Requejo, municipio de Sobrado, también había pasado el viernes el nivel de alerta con más de cuatro metros de nivel de agua, aunque este domingo ha bajado ligeramente a 3,15 metros, en umbral de prealerta, y este lunes sigue bajando a los 3 metros de nivel.

Aguas abajo, ya en Ponferrada, el Sil conserva su nivel habitual, con una altura que no supera los 0,15 metros y un caudal de poco más de 3,5 m3/s. En todo caso por la suelta de agua de la presa del Boeza, se ha producido desbordamientos y la crecida del río provocó la inundación del acceso a Toral de Merayo por segunda vez en menos de un mes. Por cierto, en Toral de Merayo la crecida del río Oza también anega zonas del pueblo, y el Ayuntamiento ha tomado medidas preventivas como reforzar la escollera en barrios como La Rastriera.

El otro punto conflictivo en la Comarca es el paso del río Cúa por Quilós (Cacabelos). El nivel ha sobrepasado el umbral de prealerta el viernes al encontrarse cercano a los 3 metros metros, aunque este domingo se ha reducido a 2 metros, por debajo ya del umbral de activación, y así se mantiene este lunes. Su caudal sufre aun un repunte de forma abrupta, pasando en estos últimos días de 15 a 130 m3/s.

El propio Cúa, en Fabero, también se encuentra crecido aunque en menor medida. Si el lunes pasado las aguas marcaban una altura de 0,7 metros, este comienzo de semana el río sobrepasaba el nivel de 1,65 metros, aunque aún se encuentra todavía a cierta distancia de los niveles que marcan la alerta. El caudal del Cúa sí experimenta una importante crecida y supera los 40 m3/s, cuando el lunes apenas superaba los 7 m3/s.

En Villafranca, el Burbia ha crecido desde los habituales 0,7 metros de altura hasta los casi 2 metros que se han podido medir este lunes, y baja del umbral de activación de las alertas en este punto. El caudal del Burbia también se ha rebajado en las últimas horas, puesto que llegó a 140 hm3 por segundo, y este lunes ha descendido a 85.

El río Boeza, a la entrada de Bembibre, se encuentra ya por debajo del metro de caudal, lejos de los niveles de alerta. El caudal en ese punto ha bajado en las últimas horas de 45 m3/s, a 18, mucho más allá en todo caso de los 5 m3/s que registraba una semana atrás. La crecida provocó el viernes la inundación de nuevo de las instalaciones deportivas de El Barco. Además la crecida ha cortado la carretera de acceso a la población de Villaverde de los Cestos.

El río Cabrera a su paso por Puente de Domingo Flórez, pasó el sábado en nivel de umbral de activación de alerta, con 2,7 metros de nivel en sus aguas. En las últimas horas se ha rebajado a los 2 metros. Eso sí, muy por encima del metro de caudal que llevaba el lunes pasado.

Etiquetas
stats