Denise sufrió una “muerte violenta” y sus manos fueron amputadas por un arma blanca
La Audiencia Provincial de León acogió este martes una nueva sesión del juicio por el asesinato de la peregrina estadounidense Denise Pikka Thiem que sienta en el banquillo de los acusados a Miguel Ángel Muñoz. Este martes ha sido el turno de los médicos forenses, que han asegurado en su declaración ante el Tribunal del Jurado que la víctima murió “de forma violenta” y como consecuencia de una “traumatismo craneoencefálico severo”, unas lesiones que han considerado incompatibles con una caída.
La peregrina, también según su testimonio, no tuvo ninguna oportunidad de defenderse de su agresor, Miguel Ángel Muñoz, que le propinó hasta tres golpes en la cabeza con un objeto de superficie roma que podría ser un bate o un palo causándole heridas en cráneo y mandíbula.
Los médicos forenses que han prestado declaración en la Audiencia Provincial de León fueron quienes se ocuparon del levantamiento del cadáver, autopsia e imputabilidad del acusado. En cuanto al examen de Miguel Ángel Muñoz, descartan que padezca un trastorno límite de personalidad o explosivo intermitente.
En lo que se refiere al levantamiento del cadáver, se realizó el 12 de septiembre de 2015 a las 00.40 horas en una zona de monte bajo, laderas suaves y sin precipicios por lo que se descarta que Denise hubiera podido sufrir una caída. Además, se encontraba a 200 metros de la carretera.
El cuerpo sin vida de la peregrina estaba oculto con ramas, boca abajo y con las piernas dobladas sobre los mulsos, además le faltaban las dos manos, que nunca han sido localizadas. Los forenses han precisado que los restos mortales estaban en un avanzado estado de descomposición y que les llamó la atención que el cuerpo estuviera en una posición forzada.
Así, han asegurado que el cuerpo había sido movido de sitio y que con anterioridad se encontraba en un lugar más pequeño, una conclusión a la que llegaron por la inexistencia de larvas en el cadáver y que también fue ratificada por el propio acusado en una de sus declaraciones ante el juez.
En relación a las manos de Denise, han descartado que pudieran haber sido devoradas por animales carroñeros o que se hubieran desprendido del cuerpo durante el traslado del cadáver ya que fueron cortadas por un arma blanca o algún tipo de objeto cortante, según se desprende de la autopsia.
