El Ministerio auditará los plazos de la variante de Pajares a Asturias para ver si son técnicamente viables
El nuevo ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha dado ya las primeras pistas sobre cómo afrontará los compromisos del anterior Gobierno del PP con respecto a los plazos de las distintas líneas de alta velocidad, entre ellas la que afecta a la provincia de León de camino a Asturias. Aunque también ha dejado claro que el cambio en el Ejecutivo central no afectará a los compromisos de inversión ni a los contratos en marcha o licitados. “La voluntad es no paralizar ni demorar nada”, aseguró el ministro a un medio madrileño.
Lo que parece que no está dispuesto a hacer es asumir promesas que no estén sustentadas en realidades técnicas y sean imposibles de cumplir. Por eso Fomento encargará una auditoría técnica para comprobar si los distintos plazos para las líneas de alta velocidad son asumibles desde el punto de vista técnico, pues los nuevos responsables del ministerio creen que algunas de estas fechas se anunciaron “para quedar bien”, pero a día de hoy no podrían cumplirse.
El anterior ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, se comprometió a que la conexión del AVE a Asturias por la Variante de Pajares desde el municipio leonés de Pola de Gordón estaría terminada en el verano de 2020. De la Serna confió en que a finales de 2019 los trenes comenzarían a circular en pruebas por uno de los túneles “a la mayor velocidad posible y con la máxima capacidad”.
Hay que recordar que la certificación de que una línea de alta velocidad es operable no depende ahora del ministerio,sino de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria, un organismo independiente creado a raíz de las directivas comunitarias en materia ferroviaria. Esta agencia es la que tiene ahora en sus manos la puesta en servicio comercial de las distintas líneas.
Viabilidad técnica
El plazo del AVE entre León y Asaturias será también auditado para comprobar si es posible técnicamente, según confirmaron fuentes del Ministerio. El propio Íñigo de la Serna aseguró hace sólo unas semanas que el trayecto entre Oviedo y Madrid llevaría solo dos horas y media, y dos horas y 50 minutos hasta Gijón.
Para ello sería necesario eliminar el fondo de saco de la estación de León, que se está ejecutando y ahorraría unos 15 minutos; la modernización del tramo León-La robla; y la instalación del sistema ERTMS, que reducirá unos diez minutos la distancia a cubrir entre León y Valladolid, y que ya acumula dos años de retraso.
Queda pendiente la finalización de la variante de Pajares, con 200 millones aún por invertir y el cambiador de ancho en Lena. También mejoras en los tramos Lena-Oviedo, Gijón-Avilés y la ampliación de la doble vía en tramos entre Valladolid y Palencia, que como hasta León, carecen de ella. Estos dos últimos proyectos, apenas esbozados, implicarán reducir el tiempo del viaje de 2.50 horas a dos horas y media, un compromiso que Foro arrancó al PP pero que no fue argumentado al detalle.
