Abriendo puertas a un futuro laboral

Seis alumnos se forman en la actualidad para obtener el certificado de profesionalidad en 'Promoción Turística local e Información al visitante' que imparte el Instituto Leonés de Desarrollo Económico, Formación y Empleo, Ildefe, y hacen sus prácticas en diversos puntos de la capital. Lo hacen dentro del programa programa formativo 'Conoce León', que forma parte de los proyectos DUAL -antiguos Talleres de Empleo-, en el que los participantes reciben formación y desarrollan trabajo práctico real en tareas de servicio público. Este programa se inició en abril y se extiende hasta diciembre de este año y está cofinanciado por la agencia de desarrollo local del Ayuntamiento de León y Ecyl.

Los seis estudiantes (dos hombres y cuatro mujeres), todos ellos mayores de 25 años, participan en un itinerario formativo que les capacita para promocionar y comercializar destinos turísticos locales, gestionando servicios de información turística y participando en la creación, comercialización y gestión de productos y servicios turísticos del entorno local, utilizando, en caso necesario, la lengua inglesa, según destacan desde el Ildefe.

El grupo distribuye su tiempo al 50 por ciento entre la formación teórica en información y promoción turística e inglés profesional que reciben en el Complejo Abelló y su trabajo práctico en la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de León en San Marcelo, el Palacio del Conde Luna, el Centro de Interpretación Romano -Casona de Puerta Castillo- y las criptas de calle Cascalerías y Puerta Obispo. Es la primera vez la agencia de desarrollo local del Ayuntamiento de León, Ildefe, imparte esta especialidad formativa en el entorno local, a partir de su trabajo de análisis de sectores que tienen posibilidades de creación de empleo.

Con nombre y apellido

Isabel Soberón es la monitora de inglés turístico y encargada de tutorización de los alumnos, de quienes comenta que son “personas responsables y realizan un trabajo de formación que consideran necesario para su reciclaje dentro del mundo laboral”. El inglés, dice, es básico para manejarse dentro de la acción turística y por eso y dado que los propios alumnos tienen conocimientos dispares, “intentamos un nivel estandarizado que les permita moverse de forma independiente y atender a lo que solicite la gente”. También acompaña a los alumnos, en este caso en el ámbito de las prácticas, Tatiana Escapa. Lo hace en la Oficina de Turismo, donde ella trabaja y les enseña la labor cotidiana y el trato con el público. “Lo básico es dar a la gente lo que a ti te gustaría encontrarte en otra ciudad”, dice.

Charo Fernández, natural de León, tiene 49 años. Diplomada en Magisterio, trabajaba como técnico de guardería infantil pero la crisis la mandó a la cola del paro, en la que permaneció dos años y dos meses hasta comenzar el curso, al que llegó porque se lo comentó una amiga. “Me parecía muy interesante, algo novedoso para mi; un cambio que necesitaba. La formación es muy completa y me gustaría que supusiese una oportunidad en el mercado laboral. Cuando me quedé sin trabajo estuve buscando y no encontré nada y puede que cuando acabe el curso quiera dedicarme a esto de lleno”, explica poco ante de acceder a la cripta de Puerta Obispo para atender a un grupo de visitantes.

Lo más interesante, apunta, es “que te relacionas con mucha gente, de aquí y de fuera y les enseñas lo bonito que hay en León. El curso ayuda a aprender nuevas técnicas, a enfocar un posible negocio en otros temas, buscando cosas nuevas en la misma ciudad. Me gusta mucho y puede que me dirija a este camino”. En este programa, subraya, “trabajamos en equipo, nos ayudamos y para mi es lo más importante, que entre nosotros nos llevamos muy bien”. Su labor, recalcan, no es de guía turístico porque no lo son; se trata de comentar las ubicaciones y ofrecer información a los usuarios.

“Viernes, sábados y domingos empezamos en el Centro de Interpretación Romano de Puerta Castillo donde hacemos una visita comentada de tres cuartos de hora y explicamos el contenido de cada sala. Les acompañamos a las criptas, aunque por el camino no les podemos comentar cosas de la ciudad porque no somos guías turísticos. Una vez que llegamos a las criptas les informamos de su contenido y luego vamos a Puerta Obispo y les enseñamos parte de la antigua puerta romana, la muralla del siglo I y parte de las termas que están enterradas debajo de la catedral”, detalla. La formación que reciben en el Ildefe les permitiría, una vez concluida, entrar en el ciclo Superior de Turismo y convalidar asignaturas.

Julia Zamorano, hija de leonesa y zamorano, nació en Bruselas (Bélgica) hace 29 años y vive desde los cuatro en España. Es ingeniera agrónoma y después de no encontrar trabajo en su área comenzó a ayudar a una tía suya en una agencia de viajes ubicada en el extranjero. “Estoy muy contenta. Quiero abrir un poco mi campo de posibilidades laborales y pienso que el turismo está en auge, nunca me había enfrentado a la atención al cliente y me está pareciendo algo muy especial, una experiencia muy bonita y enriquecedora”, añade.

Para ella, el programa está resultando una experiencia “muy, muy positiva, tanto a nivel personal, como laboral y cultural. Te hace abrir la mente. Estoy aprendiendo muchísimo de todo lo que tenemos en nuestra ciudad, que es una gran desconocida y es una pena”. De momento no se plantea emprender y sí seguir buscando empleo cuando concluya este periodo de formación.

María Jesús Montaña, de 42 años, trabajó 17 años en una empresa hasta que se quedó en el paro. Diplomada en Graduado Social, llevaba sin empleo casi dos años cuando accedió al curso y ahora, explica, se le abre “una perspectiva nueva en el mundo turístico, una salida a nivel profesional y a nivel personal me está sirviendo para aprender muchas cosas de León, sobre todo su historia”. También le sirve, añade, una mayor atención al cliente, ver las caras de sorpresa y la sorpresa que les la explicación. Un señor de León me preguntaba el otro día que si esto era un servicio. Una señora que vive en Si de esta manera.

Los turistas con los que tratan son de edades y procedencias diversas; “son personas muy educadas, amables y agradecidas con las explicaciones que les damos”. “Cambias un poco la perspectiva, vuelves a estudiar, te activas bastante y te adaptas. Es una experiencia nueva, con conocimientos nuevos y espero que mi campo laboral se pueda orientar en cierto aspecto al mundo turístico, sobre todo en León, que es un punto neurálgico del Camino de Santiago”, afirma.

Y es que el turismo se presenta como uno de los sectores más susceptibles de crecimiento en la ciudad. El concejal de Empleo y Promoción Industrial, Ángel Villa, comenta que “la realidad nos dice que la actividad turística se ha convertido en un motor fundamental de la economía local, por su elevada aportación a la creación de renta, riqueza y empleo, y por generar importantes efectos dinamizadores, aún en épocas de crisis, en otros sectores económicos”.

5.469 cotizantes

El turismo constituye uno de los ejes importantes de empleo de León y su Alfoz, con cerca de 5.469 cotizantes y representa el 6,9% del empleo (entre hostelería, hotelería, guías profesionales y similares), según datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social correspondientes a fecha de 30 septiembre de 2013 aportados por el Ildefe.

En los últimos años se ha observado un cambio de mentalidad en los turistas, el retroceso de las tradicionales modalidades como el turismo de sol y playa ha sido paralelo a la búsqueda de fórmulas nuevas en las que lo exótico y lo diferente se aúnan con la búsqueda de la naturaleza, de los recursos histórico-patrimoniales y de los valores culturales tradicionales. Es así como ciertos espacios interiores españoles y más concretamente de Castilla y León han adquirido una importancia inusitada, convirtiéndose en territorios con una oferta potencial de primer orden con el añadido de ser relativamente asequibles, subrayan desde el Instituto leonés de Desarrollo.

Las nuevas formas de turismo se han convertido además, en fuente de empleo y de riqueza en muchos lugares. Pero esa generación de empleo en las nuevas formas de turismo requiere una cualificación profesional y una formación que a veces es casi inapreciable y que supone un aspecto importante a considerar. Así, es necesario para el desempeño de esta pujante actividad, la actuación en campos como la formación, con el desarrollo de cursos en temas relacionados con la gestión de empresas o atención al cliente sin olvidar las nuevas tecnologías de la información que generarán importantes cambios en las profesiones de este sector, creando instrumentos de comercialización innovadores.