El sistema de salud de Castilla y León obtiene un 6,48, cuatro décimas menos que en 2012
El sistema de salud de Castilla y León logró en el Barómetro Sanitario correspondiente a 2013 una nota de 6,48, casi cuatro décimas menos que en el realizado un año, cuanto la calificación fue del 6,82, pero superior a la media nacional, que bajó al 6,41, según los datos ofrecidos hoy por el Ministerio de Sanidad.
Los aragoneses, con un 7,29, son los ciudadanos más satisfechos con su sistema de salud, por delante de navarros (7,27), asturianos (6,98), vascos (6,84), riojanos (6,77), cántabros (6,75), murcianos (6,63), andaluces (6,62). Así, Castilla y León que ocupaba el séptimo lugar en 2012, retrocede hasta la novena posición, por delante de Canarias (5,70), Extremadura (6,03), Galicia (6,07), Baleares (6,11), Castilla-La Mancha (6,15), Cataluña (6,22), Valencia (6,24) y Madrid (6,45).
La nota ahora vuelve a romper la tendencia de satisfacción ciudadana que reflejan los castellanos y leoneses en distintos barómetros y que, desde 2004 hasta 2011 se incrementó de forma progresiva. Así, en 2004 se alcanzó 6,15; 6,4 en 2005 y 2006; 6,64 en 2007; 6,81 en 2008; 6,82 en 2009; 7,01 en 2010; y 7,06 en 2011.
De forma general, la sanidad ocupa el segundo lugar en cuanto a las áreas de mayor interés de la sociedad castellana y leonesa. Así, el 43,6 por ciento de los ciudadanos sitúa al trabajo en primer lugar, mientras que el 30,31 por ciento da prioridad a la sanidad y el 10,2 a la educación. A nivel nacional el orden es el mismo aunque con porcentajes diferentes: trabajo (41,9 por ciento), sanidad (26,4 por ciento) y educación (14,8).
Atención Primaria
Por otra parte, los castellanos y leoneses le otorgan un 7,41 a las consultas de Atención Primaria, y un 7,01, a las de los especialistas. Menor nota reciben las urgencias de los hospitales, con un 6,48. Sin embargo, el ingreso y la asistencia en los complejos hospitalarios de la Comunidad obtiene un 7,19. En el conjunto del sistema, las calificaciones son inferiores ya que las consultas de Primaria logran un 7,38; las de especializada, un 6,83; las urgencias hospitalarias, un 6,14, y la asistencia de estos centros, un 6,82.
Asimismo, seis de cada diez ciudadanos de la Comunidad considera que la atención que ha recibido del médico de cabecera ha sido buena (61,29 por ciento), mientras sólo un 12,2 la califica de regula, y un 2,69, de mala. No obstante, más de un 40 por ciento asegura que pasaron entre dos y tres meses en ser vistos por un especialista desde que lo remitió el facultativo de familia. También, el 56,9 por ciento valora la coordinación entre ambos niveles asistenciales, ante un problema de salud.
Respecto a la atención especializada, siete de cada diez usuarios de Castilla y León entiende que ha sido buena, frente al 62,19 de media nacional. Solo un 1,99 por ciento cree que ha sido mala. Por ello, la mitad de los encuestados afirma que la atención recibida en un hospital fue buena (58,05 por ciento) y un 30,31 por ciento, muy buena. Menos de un siete por ciento la considera regular o mala, un porcentaje inferior a la media nacional, que supera el nueve por ciento. También, el barómetro refleja que la atención en la última urgencia fue bastante rápida para el 45,42 por ciento y muy rápida para el 25,4 por ciento.
Crisis y listas de espera
En cuanto a la evolución de los servicios asistenciales en los últimos cinco años, el periodo de mayor virulencia de la crisis económica y los ajustes en las políticas públicas, el 43,8 por ciento usuarios de la Comunidad consideran que la atención en Primaria sigue igual, e incluso, un 27,7 que ha mejorado. En cuanto a los hospitales, sin embargo un 31,07 por ciento de los ciudadanos entiende que las consultas de los especialistas ha empeorado, como la Atención Hospitalaria (30,12 por ciento). Además, para casi cuatro de cada diez ha empeorado el funcionamiento de las urgencias.
Otro de los aspectos que analiza el informe de Sanidad es el estado de las listas de espera en los últimos 12 meses. Para un 39,35 por ciento siguen igual, mientras para un 35,5 por ciento han crecido. Solo un 10,19 por ciento sostiene que han mejorado, a pesar de los planes puestos en marcha por la Consejería del ramo para contener su aumento e incluso rebajar la demora, lo que ha permitido que prácticamente todos los pacientes con patologías graves sean intervenidos en menos de 30 días.
Copago
Por otra parte, en la encuesta se preguntó si el sistema de copago farmacéutico es más justo que el anterior, afirmación que con la que el 55,9 por ciento de los castellanos y leonese se mostró poco o nada de acuerdo.
En el Barómetro también se pregunta por la receta electrónica. El 61 por ciento de los encuestados a nivel nacional conocen el sistema de receta electrónica, y el 40 por ciento lo han utilizado. Este porcentaje es diez puntos superior al del año anterior (30,9). Por comunidades, Galicia es la autonomía donde más encuestados señala que conoce lel sistema de receta electrónica y Castilla y León (44,3 por ciento) la que tiene menor porcentaje.
A su vez, el 83 de los castellanos y leoneses consideran que el calendario de vacunación infantil debe ser el mismo en todo el país, porcentaje que a nivel nacional baja al 79,8 por ciento, y el 86 por ciento considera que la aportación de los pacientes en las recetas deben ser igual en todas las comunidades.-81,8 en el conjunto de España-.
