La guerra familiar por el Grupo Eulen se mantiene viva pese a la desaparición de David Álvarez

Carlos S. Campillo / ICAL. María José Álvarez Mezquíriz en una visita a León en 2016.

Antonio Vega

El 'Falcon Crest' patrio protagonizado por la familia de origen leonés Álvarez Mezquíriz, dueños del Grupo Eulen o las bodegas Vega Sicilia, se mantiene con las espadas en alto más de un año después del fallecimiento del patriarca David Álvarez. La presidenta del Grupo Eulen, María José Álvarez Mezquíriz, ha concedido una entrevista a la revista Actualidad Económica en la que arremete contra sus cinco hermanos 'rebeldes' con los que mantiene la pugna por el control de las millonarias empresas creadas por su padre..

La principal ejecutiva de Eulen, que Forbes situó como una de las 100 personas más ricas de España con una fortuna de 500 millones de euros, arremete contra sus hermanos 'díscolos' -Marta, Elvira, Juan Carlos, Emilio y Pablo Álvarez Mezquiriz- que hace más de un lustro intentaron quitar el poder ejecutivo a David Álvarez en sus empresas, lográndolo hasta el momento en el holding 'El Enebro' que posee las bodegas Vega Sicilia o la cárnica Valles del Esla. Según la presidenta de Eulen el origen de la disputa es clara tras la negativa de 'Don David' a jubilarse, “la reacción de mis hermanos solo la entiendo por un acto de soberbia y de prisas por alcanzar el poder”.

La directiva advierte en la misma que “en la vida me queda todo por hacer. Si puedo, me gustaría dar mucha guerra, aunque llevo muchos años trabajando, muchas horas, muchos aviones y he tenido muchos disgustos” y asegura que sigue la batalla judicial por el control de El Enebro ya que “no sé nada de las bodegas, de los inmuebles, no sé nada de nada porque no te informan”, pese a tener una participación del 16%.

El pasado mes de abril los hermanos 'díscolos' ejecutaron un singular cambio societario pasando a controlar El Enebro desde una socieda ubicada en Reino Unido tras un acuerdo con el otro hermano que era fiel a los designios de su padre - Jesús David- tras una sentencia por la que David Álvarez recuperaba los derechos políticos, aunque nunca se ejecutó.

María José Álvarez Mezquíriz cumple ahora un año como presidenta del Grupo Eulen, designada tras la muerte de su padre y haciendo valer sus derechos como heredera universal. Sólo esta empresa cerró 2016 con una facturación de más de 1.500 millones de euros.

Los hijos 'díscolos' de David Álvarez y el empresario fallecido en noviembre de 2015.

En la entrevista a la revista destacan una singulares palabras de la ejecutiva sobre el nuevo presidente norteamericano, Donald Trump. En ellas asegura que “pienso que hay que darle una oportunidad, porque lo han elegido los ciudadanos. Además, igual viene bien un cambio de rumbo”. Eulen tiene casi el 10% de su negocio en Estados Unidos y ha anunciado un plan de expansión para los próximos años mediante adquisiciones selectivas.

Pese a la tremenda disputa familiar, que ha llenado las páginas de la prensa económica por la relevancia de sus empresas, María José Álvarez Mezquíriz dejaba entrever un rayo de esperanza entre tanta polémica, “yo supongo que todo esto se acabará arreglando de una forma u otra, pero desde luego no va a ocurrir a corto plazo”.

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