Así fue la peligrosa supercélula que descargó ayer su furia contra la provincia de León

No es fácil 'cazar' la imagen de una supercélula. Ayer Jesús Calleja lo consiguió tras dos horas de persecución.

León fue ayer domingo víctima de una supercélula. Se trata de un fenónemo violento que aúna una tormenta con un ciclón, y que siempre deja tras de sí fuertes precipitaciones en forma de granizo de grandes dimensiones. Y la de ayer se cumplió de libro, por desgracia, por los daños que causó su aparición de numerosas comarcas.

Es algo así como la tormenta perfecta. Las más desvastadoras son propias de las llanuras de Estados Unidos, pero en España se producen todos los años, aunque lo habitual es que no sean más de dos o tres. Y cuando se ven, son motivo de 'caza' de los aficionados, porque son fenómenos por otra parte espectaculares.

La supercélula de ayer tuvo de 'cacería' por la provincia leonesa a uno de sus paisanos más conocidos, Jesús Calleja. El presentador y aventurero deambuló por varias carreteras de la provincia a la espera de poder retratar el fenómeno, algo nada fácil de hacer. Y tuvo éxito. Suya es la fotografía que ilustra este artículo, y suyo este VÍDEO:

También llamada supercelda, se trata de una tormenta enorme que viene contra el viento, que es producido por la tormenta en si, ya que alimenta las corrientes ascensionales, y acaba girando sobre sí misma, creciendo a gran velocidad. Antes de que aparezca, se detecta un silencio significativo en el aire cálido y húmedo. Luego el viento sopla y se dirige a la tormenta, cuyos truenos se oyen a gran distancia. El viento no suele ser más que moderado, pero presagia la violencia.

Un 'río' por las calles de los pueblos

Este tipo de fenómenos son muy apreciados por los llamados 'cazatormentas', personas que se deleitan buscando la forma de sentir y sobre todo retratar sus impactantes formaciones en el cielo, así como el efecto devastador de sus precipitaciones. Generando imágenes como ésta que ayer se vivió en las calles del pueblo de Antoñán del Valle, convertidas en minutos en un auténtico río:

Las predicciones de días atrás nada hacían presagiar. Pero a última hora de la mañana del domingo 27 de agosto saltaron las alarmas. Los mapas de previsión, aunque con poca antelación, ya mostraban el altísimo riesgo de una 'tormenta perfecta' sobre la provincia.

Y así fue. Los efectos dañinos se convirtieron pronto en la noticia de un día aciago.

Para más información sobre las supercélulas en España, recomendamos ésta de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), pinchando aquí.

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