Complicaciones de tráfico por una obra en la avenida Álvaro López Núñez

Un verano más, un agosto más, las obras vuelven a la avenida Álvaro López Núñez de la capital leonesa, esta vez a causa del necesario cambio del colector general de aguas que atraviesa la carretera de esta vía pública, un proyecto que ejecuta la empresa mixta Aguas de León. Las labores obligan a realizar una zanja de profundas dimensiones de lado a lado de la avenida, casi enfrente del colegio Maristas San José y poco antes del puente bajo el que pasaba la línea de Feve, ahora supuesta y oficialmente en también obras, aunque hace semanas que no se ve ningún obrero.

El problema es que tales trabajos de renovación del colector están provocando complicaciones en el tráfico rodado, porque la zona está intransitable para todos los vehículos de motor. Unas enormes vallas, los muchos camiones pesados presentes y grandes máquinas lo impiden. La empresa y el Ayuntamiento han elegido este momento del año por ser en el que menor trastorno se podría causar por la menor presencia de tráfico en toda la ciudad en pleno verano y aseguran que el plazo máximo de ejecución, que incluso se podría acortar, es de diez días.

Lo cierto es que el ritmo es frenético en la zona desde que el lunes comenzaran los trabajos y se instalaran en los accesos a la avenida las señalizaciones que advierten de los cortes de tráfico. En la rotonda de la antigua Cruz Roja se advierte que para acceder a San Mamés, la Carretera de los Cubos o a Ramón y Cajal es imprescindible dar un enorme rodeo por la iglesia de Las Ventas y posteriormente la avenida de San Mamés.

Sin embargo, dado el lugar del corte, los que lleguen desde la Plaza del Espolón y pretendan continuar hacia Eras de Renueva o la carretera de Asturias pueden hacerlo con un menor rodeo callejeando por las vías Bilbao y Pérez Crespo. Aún así, no son pocas las quejas de los conductores que aseguran no haber sabido nada de estos cambios de manera previa para evitar, en lo posible, la zona.