La familia del joven muerto junto a un vagón de tren abandonado recuerda con esta carta su 17 cumpleaños
El joven Iván García Ovalle, de León, cuya desaparición puso en vilo a la capital leonesa durante tres días del pasado mes de febrero, y cuyo cuerpo sin vida localizado en una zona ferroviaria cercana al campo de fútbol de León conmocionó a la opinión pública, cumpliría 17 años esta semana.
Sus familiares han escrito, en su nombre, una emotiva carta que transcribimos literalmente, por su interés:
El 29 de agosto hubiera cumplido 17 años.
El 17 de febrero de este año, tras salir de clase, solo pensaba en pasar la tarde haciendo una de las cosas que más me gustaba, buscar lugares especiales para practicar mi afición preferida, la fotografía.
Muy cerca de mi centro escolar, Don Bosco, accedí con mi bicicleta a una zona de vías ferroviarias entre el campo de fútbol municipal de León y la zona de Michaisa. Pasé sin problemas, pues había un sendero marcado y no existía ninguna señal que impidiera el paso.
Sobre un muro-pilar del puente de la Avenida de Portugal, aparqué mi bicicleta dejando al lado mi mochila con los libros. Me acerqué a unos vagones que estaban fuera de servicio, alguno de ellos grafiteado; ninguna señal indicaba que en la zona pudiera existir algún peligro, nada hacía sospechar que aquellas catenarias de tendido eléctrico que se encuentran sobre esos vagones pudieran estar operativas y guardaran en su interior un mortal secreto, un voltaje de 3.300 voltios; tampoco sabía que tan solo con acercarme a un metro de distancia del cableado, se pudiera producir “un arco eléctrico” con la consiguiente descarga.
Con toda la tranquilidad de un chico ilusionado con la fotografía, subí a los vagones; ninguna señal alertaba de la posible peligrosidad de que tomara unas fotos desde los mismos.
Lamentablemente, dos días después, mi familia comprobó que aquella idea inocente se había convertido en tragedia.
Me gustaría que a nadie más le sucediera lo que a mí.
Esta zona debería tener un cerramiento adecuado que imposibilite el acceso y disponer de señales alertando del peligro de descarga eléctrica en todo esa área; pues los vagones allí emplazados -aparentemente en desusose utilizan ocasionalmente y las catenarias están plenamente operativas.
Ni una persona más debería morir en las vías del tren por la falta de seguridad en esta zona.
Estimada familia, se que durante ese fin de semana no parásteis de buscarme, que se unieron a vosotros muchos amigos y voluntarios, y que contásteis con la ayuda de la prensa
Mi deseo en este mi 17 cumpleaños se puede expresar en una frase “NUNCA MÁS”, que mi muerte sea la última en este tipo de circunstancias, que todo el mundo pueda celebrar su próximo cumpleaños.
