“Desordenación territorial”
Recién presentado el proyecto que muestra el mapa de áreas funcionales que la Junta autonómica pretende imponer, a toda prisa para no pillarse los dedos antes de las próximas elecciones, se deja ver un reparto muy peculiar en la provincia de León, que contrasta con el de el resto de las provincias.
Mientras para el resto de provincias se ha creado unas áreas funcionales cercanas a las poblaciones con más habitantes, en la de León se crean dos grandes áreas que comprenden más de la mitad de la provincia.
De nuevo desde la Junta, con un total desconocimiento de la orografía y distribución poblacional, se inventa las áreas desde los despachos sin atender a las verdaderas necesidades de la provincia.
En una provincia donde la histórica división comarcal es la mejor guía para el funcionamiento eficaz de los servicios públicos, desde los despachos se siguen inventando nuevas divisiones sin sentido. A la atrocidad de los primeros mapas en los que poblaciones leonesas eran incluidas en las áreas de otras provincias, ahora se inventan unas nuevas donde, por ejemplo, poblaciones de comarcas tan diferentes como la Maragatería o el Bierzo se las mete en el mismo saco, sin contar en ningún momento con el tipo de comunicaciones o las distancias entre cada núcleo.
Esta experiencia no es nueva, se ha intentado con la educación y con la sanidad, pretendiendo cerrar centros rurales, obligando a los vecinos de los pueblos afectados a desplazarse varios kilómetros para cubrir sus necesidades. Y los vecinos, como es normal, se han revelado, no aceptan que los servicios públicos que pagan con sus impuestos cada vez estén más lejos, ante lo que la Junta se ha visto obligada a, de momento, retrasar sus planes. De nuevo, ante el conocimiento de este mapa, pueblos como Santa Colomba, Lucillo o Truchas, entre otros, se levantan contra tal disparate.
Pero parece que la Junta autonómica no quiere más demoras e insiste en que los pueblos leoneses sigan quedándose sin servicios, y así continuar con su agenda de despoblación; porque está demostrado que las otras agendas son un auténtico fracaso.
De nuevo se vuelve a constatar la falta de equidad a la hora de aplicar criterios según que parte del territorio autonómico se trate. Y se sigue confirmando que desde los despachos no saben cuales son las necesidades de cada zona, solo se dedican a dividir con escuadra y cartabón, trazando líneas sin sentido. Por lo que desde Esllabón Lleonesista, ante todo, exigimos que se deje de experimentar sin conocer cada palmo del territorio que se pretende reordenar, tanto la orografía, como las comunicaciones, distancias, culturas, y demás singularidades. Además, dado el fracaso evidente y la falta de equidad de esta comunidad autónoma, volvemos a insistir en su disolución inmediata, no es normal que se apliquen diferentes varas de medir desde que existe esta comunidad autónoma y aún se siga justificando su existencia.
