La Junta anuncia 'cocinas de proximidad' y más inspecciones tras los gusanos en la sopa escolar

Aspecto del aula que sirve de comedor en el CRA de Riaño, donde también aparecieron larvas de gusano en la sopa.

Ical

La Junta de Castilla y León está introduciendo mejoras en los menús escolares, impulsará nuevos controles a través de las consejerías de Sanidad y Educación y prevé dotar al servicio de cocinas de aproximación en la Comunidad. Así lo aseguró el consejero de Educación, Juan José Mateos, en el Pleno de las Cortes, quien también aseguró que se están terminando los expedientes abiertos a Serunión, la empresa adjudicataria del servicio de comedor escolar que ha protagonizado un incidente por la aparición de gusanos en la comida.

Al respecto, el titular de Educación aseguró que en “estos días” se han mejorado los menús siguiendo las recomendaciones de los especialistas en cuanto a combinaciones y adaptaciones a niños con patologías crónicas. Mateos detalló que se han eliminado algunos pescados, se han incrementado las frutas servidas a la semana, se ha incorporado más cereales integrados (arroz o pan) y se ha establecido un máximo de frecuencia cada 15 días de los precocinados y las frituras.

“Lo vamos a mejorar”, dijo el titular de Educación que también avanzó medidas en materia de infraestructuras con la construcción de cocinas de aproximación en la Comunidad, en diferentes ubicaciones, como Valladolid. También avanzó que Sanidad y Educación están diseñando unidades de control para seguir mejorando el servicio, que recordó sigue el documento de consenso que el Consejo Interterritorial de Salud aprobó en 2010.

El consejero respondió así al procurador socialista Miguel Ángel Fernández Cardo que utilizó un informe del Servicio Territorial de Sanidad para asegurar que las comidas tardan diez o 15 días en llegar, en lugar de una semana; no disponen de muestras testigo; no cumplimentan las fichas; se recepcionan sin revisar su estado, y no se ofrece documentación sobre trazabilidad.

“La bazofia es más barata a corto plazo que la buena alimentación”, dijo Fernández Cardo quien reclamó a la Junta la rescisión del contrato con Serunión, como aseguró reclaman los padres y madres que participaron en la concentración a las puertas de las Cortes. Además, recalcó que ha mentido y que ha gestionado mal la “crisis” alimentaria.

Asimismo, el consejero respondió a la oposición sobre este asunto, “desagradable”, pero “puntual”. Mateos señaló que afectó al 1,2 por ciento de los comedores de Castilla y León y recalcó que las empresas que prestan el servicio de comedor tienen que cumplir la normativa que regula su actividad. Sin embargo, el portavoz del Grupo Mixto, José María González, reclamó la gestión directa por parte de la Junta, para poner “lo público al servicio de los ciudadanos”.

González aseguró que mientras el Gobierno autonómico gestionó directamente este servicio no hubo ningún problema y recalcó que en este momento es “fundamental” para garantizar una alimentación adecuada a los niños que no pueden recibirla a consecuencia de la crisis económica. Sin embargo, el consejero sostuvo que el modelo público de gestión privada garantiza los controles y la seguridad higiénica y sanitaria, lo que el procurador de IU consideró una “provocación”.

Protestas en el exterior

Un centenar de personas participó antes del Pleno en las Cortes en una concentración convocada por la Confederación de Federaciones de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Centros Públicos de Enseñanza de Castilla y León (Confacal) para reivindicar la gestión directa por parte de la Junta de los comedores escolares. Los responsables de la organización indicaron que han fallado los controles de la administraciones y advirtieron de que no se conformarán con las sanciones.

Así lo aseguró en declaraciones la vicepresidenta de Confapacal y presidenta de la federación leonesa Felampa, Engracia Prieto, y su compañera de la Federación de Valladolid (Fapava), María José Gómez Rodríguez, quien criticó que la Junta haya encomendado el servicio de comedor a empresas como Serunion, que tiene abierto un expediente por la aparición de gusanos en la comida de varios centros de León y Segovia. Además, criticó que todavía no sepan exactamente que pudieron comer los niños.

Por ello, pidieron a la Junta que recupere la gestión directa de los comedores escolares para que la comida se elabore en los centros y no en otros puntos. Además, señalaron que los controles no han impedido que la comida no se sirviera en condiciones adecuadas.

Etiquetas
stats