Luis Fuentes: “En ningún caso suscribiremos un acuerdo de legislatura en Castilla y León”

Rubén Cacho/Ical. Luis Fuentes, procurador electo de Ciudadanos  y candidato de la formación a la presidencia de la Junta.

J.L./L.M.T./ ICAL

El candidato de Ciudadanos (C´s) a la Presidencia de la Junta y procurador electo, Luis Fuentes (Salamanca, 1960), se ha convertido desde el 24M en decisivo para la gobernabilidad de la Comunidad, de cinco ayuntamientos de capitales y de dos diputaciones. En una entrevista con la agencia Ical, antes de iniciar esta próxima semana las negociaciones, Fuentes explica la hoja de ruta de esta formación ante el diálogo que se abre: no habrá una negociación global, sino que cada provincia tendrá libertad; no firmará acuerdos de legislatura, ya que sólo favorecerá investiduras y después habrá que negociar proyecto a proyecto; no habrá 'cordones sanitarios' anti PP ni anti PSOE ni anti Podemos; no participarán en coaliciones de perdedores, salvo casos muy explicados.

¿Se puede decir, con los resultados del domingo, que Ciudadanos ha cumplido sus objetivos en Castilla y León?

Nosotros estamos encantadísimos con los resultados obtenidos porque los ciudadanos nos han colocado en prácticamente todas las instituciones, que es lo pretendíamos a principios de la campaña electoral. Queremos cambiar esto, elevar el listón de regeneración democrática y existe esa posibilidad y capacidad democrática para lograr ese plus de mayor democracia que necesitamos ahora mismo, más participación, más transparencia y esa regeneración que todo el mundo desea y que es lo que han pedido los votantes.

Las encuestas les otorgaban entre nueve y diez procuradores. Finalmente, ¿cinco sabe a poco? ¿Es peligroso generar expectativas que puedan luego ser defraudadas?

El ratio de error de las encuestas están entre un dos y un cinco por ciento. Con 1,5 puntos más hubiéramos tenido diez procuradores. Pero estamos encantados porque tenemos capacidad de hacer propuestas. Al principio pensábamos en tres o cuatro procuradores, pero ese 1,5 por ciento es complicado. En Valladolid, con un poco más hubiéramos tenido otro. En Soria nos hemos quedado a 80 votos; en Palencia, a menos de 200 y en Segovia, a 240. Esas cifras no las prevé una encuesta.

Lo cierto es que Ciudadanos será clave para la gobernabilidad. Han anunciado ya sus condiciones: pero en una negociación todos deben ceder un poco. ¿Son inamovibles?

No hemos venido a negociar ni sitios, ni coches, ni cargos, ni nada de eso, sino a regenerar la vida política. Necesitamos que se visualice que el voto ciudadano ha servido para un cambio y que los partidos políticos comprendan que se necesita esa regeneración. Tenemos un documento con nueve puntos de sentido común ¿Quién no va a decir que un imputado no tiene que estar en política o que quien la hace la paga? ¿O apartar a cualquiera que mienta en un currículo, o prohibir las donaciones de los directivos que tengan contratos con la administración? En el siglo XXI, cualquier partido ni siquiera debería plantearse no hacerlo así. O las primarias, ¿qué mejor forma de hacer democracia que desde el interior?

Pero una imputación puede no ser más que una declaración con garantías procesales ¿No significa eso prejuzgar o causar un daño irreparable si después es inocente?

La imputación da garantías jurídicas para que una persona pueda defenderse con un abogado. Después puede desimputarlo o no. Ahí es donde entramos nosotros. Analizaremos la situación cuando el juez, una vez escuchada su versión, no lo desimpute. Eso quiere decir que ve indicios razonables de culpabilidad. Pero en el momento que un juez ve indicios de culpabilidad ya tenemos ciertas garantías de que eso es así. Y lo pediremos con carácter retroactivo, es decir, si se imputa a un representante público a mitad de legislatura, retiraremos nuestros apoyos puntuales si no se le expulsa. Hay que ser más europeos. Hay otros países que por una multa de tráfico se deja la política por haber engañado. Aquel que engaña o que se beneficia de forma fraudulenta tiene que salir. En Ciudadanos, con pequeñas sospechas de haber mentido, hemos retirado candidatos. También habrá personas que, sin ser imputadas, no participarán con nosotros por razones de irresponsabilidad.

Pedir primarias a los demás, ¿no es entrar en la organización interna del partido de enfrente?

No hemos pedido eso tampoco. Pediremos un compromiso a los partidos políticos de que en su medida puedan plantear a sus representantes de las Cortes Generales de España un cambio en la Ley Electoral y la Ley de Partidos Políticos. El objetivo es que todos tengamos las mismas reglas del juego. Queremos un marco global mediante el diálogo entre todos. El PP no tendrá muchos problemas para firmar este compromiso porque en su programa ya lleva algunas de estas medidas. Yo estoy convencido de que las bases están deseosos de poder votar a sus propios representantes.

¿Cómo afronta las posibles negociaciones?, ¿as abordarán en conjunto o variarán función de las instituciones? Son llave en las Cortes, cinco ayuntamientos de capital y dos diputaciones, ¿cabe vincular los acuerdos?

No vamos a vincular absolutamente nada de nada. Cuando me llame Juan Vicente Herrera hablaremos de todo: sobre cómo nos planteamos la legislatura, sobre cómo llegar a ciertos acuerdos en algunos bloques. Pero después nos centraremos en el día a día: en la transparencia, regeneración, recuperación económica, eliminación de trabas y aumentar las dotaciones presupuestarias para educación, sanidad y servicios sociales. Nos sentaremos con todos los partidos que quieran hablar con nosotros en las Cortes y en los ayuntamientos, les presentaremos nuestras nueve condiciones. Si están de acuerdo y lo firman, automáticamente empezamos a charlar. Serán ellos por su afinidad y forma de pensar los que decidan con quién negocian.

¿Quiere decir eso que, por ejemplo, si hay un imputado en una institución no quedarán vinculadas todas las demás?

No. Cada institución tendrá su acuerdo y éste será con carácter retroactivo: deben comprometerse a que si en medio del mandato se imputa a algún miembro, éste sea apartado.

Entonces, ¿dará libertad a cada ciudad y cada provincia para negociar?

Los concejales de Ciudadanos tienen libertad, pero en base a la Comisión Nacional para estos acuerdos, que los tutelará. A lo mejor no entenderían los electores que se creara un gran bloque para desbancar a una lista. No lo condicionaríamos, pero lo tutelaríamos. Además, no nos sentaremos a hablar con cualquier organización que proponga romper la unidad o la identidad. Es una medida nacional, pero aplicable a las comunidades autónomas y ayuntamientos, como es el caso de UPL. Tampoco con CI-CCD, a los que votaremos en contra allí donde estemos por lo ocurrido en Valladolid con las papeletas y la Junta Electoral.

¿Sería prioritario el apoyo a la lista más votada?

No, porque existe una mayoría amparada por los votos del otro lado. Evidentemente, la más votada está capacitada para empezar la posibilidad de negociar con demás formaciones.

¿Está descartado sumarse a lo que se ha llamado 'coaliciones de perdedores', es decir, sumarse todos frente al candidato ganador?

Está totalmente descartado, a priori, hacer cualquier tipo de cordón sanitario anti PP, anti PSOE o anti Podemos. Vamos a hablar con todos. Si eso ocurriera, lo valoraríamos y nos tendrían que justificar las razones.

Muchos ojos están puestos en la formación porque les consideran llave para dar el apoyo que necesita el PP, ¿significa que C´s es el apoyo natural en esta situación?

Estamos abiertos a hablar, pero no está condicionado ni el no, ni la abstención ni el sí. No tenemos ninguna predisposición, sino que estamos abiertos a cualquier apoyo. Es cierto que en un momento dado tendrá que haber algún apoyo hacia una u otra opción.

En el caso de las Cortes, cómo planean la negociación, ¿apoyar o abstenerse en la investidura o un acuerdo más duradero de legislatura?

En ningún caso suscribiremos un acuerdo de legislatura. Nosotros estaremos en la oposición y lo que haremos será de controlar y proponer. Se podrán aprobar propuestas del PP o PSOE o nuestras que habrá que negociar entre todos. Está descartada cualquier opción que no se la abstención, el voto negativo o a favor. Es decir, no hay nada que a priori empecemos a plantear.

¿Han mantenido algún contacto ya con la Comisión de Pactos del PP o con quien vaya a llevar la negociación en el PSOE?

Solo se ha producido un encuentro informal con Alfonso Fernández Mañueco en la calle. Con el PSOE hemos contactado para hablar a partir de este fin de semana.

¿En la negociación se incluirá un puesto en la mesa de las Cortes? ¿Le gustaría tenerlo?

Consideramos que el escenario ha cambiado. Ahora habrá cuatro grupos en Cortes y queremos que esta pluralidad de las urnas tenga reflejo en el Parlamento. Queremos que tengan representación en la mesa PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos. Y también hemos dicho que no aceptaremos un puesto en la mesa si Podemos no está en ella.

¿Tiene ya pensada cuál será su primera iniciativa en la Cámara?

Será un plan de reactivación económica para todas las comarcas mineras. Hay que empezar rápidamente a dar una solución a esas personas que de aquí a 2018 tendrán problemas. Queremos empezar a preparar ese plan desde el día siguiente que entremos.

Por cierto, ¿qué opinión le merece la reflexión realizada tras los comicios por el candidato del PP, Juan Vicente Herrera? ¿considera que debe o no debe presentarse a la investidura?

No tengo ni idea de cuál es el pensamiento de Herrera. Es una cuestión interna de ellos que tendrán que tomar rápidamente. Ellos han ganado las elecciones y deberán decidir a quien presentan. Sobre la polémica con el ministro de Industria, muchas veces pasan estas cosas porque las decisiones que se toman fuera del terreno en el que están, en este caso en Madrid con la minería, condicionan los resultados finales. Es una pataleta del señor Herrera, que tendrán que ver como lo solucionan entre ellos.

En los ayuntamientos, ¿también están dispuestos a negociar solo la investidura o todo el mandato? ¿Está descartado entrar en los gobiernos municipales?

No participaremos en ningún gobierno municipal que no gobernemos nosotros. Si no entramos, no será un pacto de legislatura, sino acuerdos puntuales tras el apoyo o abstención en las investiduras. Haremos oposición, lo mismo que en las Cortes.

Si no han ganado las elecciones, ¿aceptarán los votos de otros para tener la Alcaldía, como por ejemplo en Ávila, donde Ciudadanos es la segunda fuerza?

Lo tendrán que hablar nuestros representantes en el Ayuntamiento. Tendrá que haber un sentido común. No queremos pretender ser alcaldes si no tenemos una representación fuerte en ese ayuntamiento.

¿Le ha defraudado el resultado del Ayuntamiento de Valladolid? ¿Cree que el resultado se debe exclusivamente a la aparición de otra candidatura que utilizó su nombre o pueden haber pesado otras razones?

No nos ha defraudado. Los propios electores nos han colocado con dos concejales. Está muy claro que la situación peculiar que se ha dado en Valladolid con respecto a Candidatura Independiente (CI-CCD) sí ha influido en los resultados de la ciudad y la provincia. Los achacamos directamente a esta organización. Solo hay que ver los votos que obtuvieron ellos hace cuatro años y ahora se ve que el 80 por ciento de su apoyo ha sido inducido por error por parte de gente que no pretendía ningún tipo de programa para Valladolid sino tener votos.

En el caso de la Diputación de Soria, el partido más votado es el PSOE, ¿se sacará de la negociación global?

Son los diputados de Soria quienes tienen la decisión sobre a quien apoyar. Tenemos unas líneas programáticas para llegar a acuerdos y lo único que podemos hacer es supervisarlo y firmarlo por escrito, como cualquier acuerdo en cualquier municipio. Los sorianos no han querido mayoría absoluta en la Diputación y se tendrá que hablar otro tipo de mayorías.

Durante la campaña se les tachó de ser muy dependientes de Albert Rivera, ¿tras las elecciones se plantean algún tipo de proceso interno para consolidar, desarrollar y fortalecer las estructuras internas del partido en Castilla y León?

Estamos encantados de la 'albertdependencia'. Paralelamente a la campaña electoral se ha desarrollado un proyecto para la articulación territorial del partido. Estamos en ello y se reforzará cuando pasen las investiduras y se empiece con el día a día. En Castilla y León habrá estructuras territoriales decididas por el partido. Está recogido en los estatutos, pero no nos había dado tiempo a conformarlo, algo que haremos de aquí a septiembre u octubre. A partir de ahí, cuando sea en tiempo, se celebrará un congreso nacional.

¿Cuántos militantes tiene ahora Ciudadanos Castilla y León y cuántos tenía hace dos meses?

Teníamos 820 hace dos meses y ahora casi el doble, unos 1.500. Queremos una implantación seria, bien hecha y no de aluviones. Asentarnos gracias a los buenos resultados, con bases sólidas en Castilla y León. Dar fuerza a las organizaciones provinciales y después dar cierta presencia en ayuntamientos.

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