Esperanza Aguirre dimite como presidenta del PP en Madrid
Convocó de urgencia a última hora de la mañana a la prensa, en una comparecencia improvisada en el acceso a la sede central del PP en Madrid, en la calle Génova, y ya se ha desvelado el motivo: Esperanza Aguirre dimite como presidenta del PP de Madrid.
La decisión coincide pocos días después de que el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ordenara el registro de la sede en busca de pruebas de financiación ilegal de la formación popular, dentro de la Operación Púnica que en León conllevó en encarcelamiento del entonces presidente de la Diputación, Marcos Martínez, y la imputación del entonces interventor de la institución provincial.
Se da por hecho que el escándalo generado, sumado a la decisión personal de Aguirre anunciada hoy, hará que una gestora sea quien se encargue ahora de la gestión de la formación en Madrid, al menos hasta la celebración del Congreso del partido regional que estab previsto en mayo, si no hay novedades.
“En estos últimos días hemos conocido noticias de indiscutible trascendencia que no hay que dar por confirmadas, pero me llevan a presentar mi dimisión como presidenta del PP de Madrid; Eso me lleva a asumir mi responsabilidad política”, ha asegurado a la prensa, incluyendo en su decisión la responsabilidad por haber confiado en personas como Francisco Granados, que sigue en prisión por la Púnica.
Esperanza Aguirre, nacida en 1952, sumaba hasta hoy prácticamente 33 años en cargos de alta responsabilidad tanto institucionales como orgánicos dentro del PP. El titular de su renuncia ya se produjo en 2012, cuando abandonó la presidencia madrileña y el escaño en la Asamblea autonómica, a causa de una enfermedad, “motivos personales” que también hoy ha aducido, aunque como es sabido entonces regresó a la actividad pública tras su recuperación.
