El PP se concentra en Astorga para mostrar su “defensa férrea” de las diputaciones

Peio García / ICAL El presidente de la Diputación de León, Juan Martínez (C) y el presidente del PP de León, Eduardo Fernández (CI) se manifiestan ante el Centro Ocupacional Cosamai acompañados por un nutrido grupo de alcaldes

S.Gallo/ ICAL

Los parlamentarios nacionales y regionales del Partido Popular por León se han concentrado este sábado en Astorga para mostrar su “defensa férrea” de las diputaciones provinciales.

Esta protesta, a la que han acudido los diputados, alcaldes y concejales del PP de la provincia, ha querido servir para poner de manifiesto la “frontal oposición” de los 'populares' a la eliminación de las corporaciones provinciales e insulares, uno de los puntos que figuran en el acuerdo suscrito por el PSOE y Ciudadanos, que se recoge en el documento del pacto de legislatura recientemente firmado por ambas formaciones.

El presidente del PP de León, Eduardo Fernández, ha recordado el papel de los pequeños ayuntamientos y de las diputaciones “sin el cual la forma de relacionarse de los ciudadanos con la administración y de recibir servicios no se entendería”, en especial en una provincia como León. Fernández ha ratificado que la institución provincial trabaja “para las personas” y no se reclama el mantenimiento de unas administraciones “nada anacrónicas”, sino que se desea reivindicar “el valor de la política pegada a la gente, que representa mejor que nadie la Diputación”.

Para Fernández, no todo es válido “en la carrera por llegar a La Moncloa” y ha lamentado que en el caso de León se pretenda volver “a un gobierno con las mismas hechuras que el que duplicó el paro en la provincia o decidió que se cerraba la minería”. Además ha reiterado que lo más importante es “no dónde se coloca a los políticos, sino cómo se atiende a la gente”, de ahí que Eduardo Fernández ha avanzado que el PP estará “siempre enfrente” de esta postura que constituirá una de las razones por la que los parlamentarios leoneses no respaldarán, tampoco con una abstención, el proyecto de Gobierno que PSOE y Ciudadanos someterán a votación la próxima semana.

Por su parte, el presidente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo, ha hecho un llamamiento a los socialistas para que “escuchen a los suyos” porque la supresión de las diputaciones tendría además “unas connotaciones muy especiales” en Castilla y León y en especial en una provincia como León. “Reivindicamos el papel de la institución como algo pegado al territorio” a la hora de prestar los servicios básicos y cubrir las necesidades más importantes de los ayuntamientos“.

Por ello, Martínez Majo ha considerado que las diputaciones “tienen mucho trabajo por delante todavía” por lo que se preguntó quién prestará los servicios en el caso de su desaparición. Aunque ha defendido la necesidad de modernizar y “hacer los cambios oportunos” en estas instituciones para que sean “más eficaces y eficientes”, Majo ha insistido en la necesidad de continuidad de estos órganos, y en relación a la propuesta del Consejo de Alcaldes, Majo ha recordado que un consejo sirve para asesorar “pero no para decidir ni para gestionar”.

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