León en Común extiende las sospechas de obras ilegales de Llamas a otro local de la Plaza Mayor
El grupo municipal de León en Común (Izquierda Unida) ha denunciado hoy a través de una nota de prensa que el caso de la franquicia de KFC cuyas obras sin licencias municipales inició la empresa del concejal de Comercio, Consumo y Fiestas, Pedro Llamas, no es el único caso que le afecta, por lo que ha solicitado que el Consistorio le facilite documentación.
Según la nota de prensa, “al parecer, el modus operandi del actual munícipe no se limita al pollo frito” sino que “también intentó sustituir una licencia de obra, que exigía también un dictamen de la Comisión Territorial de Patrimonio, por otra de obra menor; esta vez con éxito”. Se refieren, según su versión, a que la sociedad a la que pertenece Llamas “realizó obras en la estructura” de un conocido local hostelero en la Plaza Mayor de León, con trabajos en el inmueble “que tuvieron un valor aproximado de 600.000 euros, realizando una rehabilitación integral del edificio”.
“La obra”, continúan explicando, “consistió en rebajar el suelo del sótano más de medio metro, eliminando el muro de carga interior para dejar a la vista el comedor y la cocina y provocando que vecinas y vecinos denuncien daños en sus viviendas. Todo en un inmueble protegido dentro de la Plaza Mayor”.
Entendiendo que “la situación es casi idéntica a la protagonizada en la obra de KFC” -si bien León en Común omite que entonces Llamas no formaba parte ni del equipo de Gobierno municipal ni siquiera era concejal todavía- “exigimos a Urbanismo que revise las licencias de este establecimiento y la obra ejecutada en el mismo, y que se tomen las medidas oportunas en paralelo a las ya iniciadas por la polémica que nos obligó a pedir un Pleno extraordinario el lunes pasado” para reprobar la actitud del edil.
Para la formación política, “Llueve sobre mojado, queda claro que no es casual recurrir a licencias menores como subterfugio para actuar sin licencias ni permisos” y creen que “este trilerismo no ha tenido suficiente censura política”. “Pedro Llamas debe dimitir porque pasó hace mucho tiempo la línea roja que separa su actividad pública de la empresarial”, concluye la nota pública.
