Los mineros amplían su protesta a la carretera Ponferrada-Villablino

Fotografía de @Mayojos

ileon.com

En la mañana de hoy las protestas mineras por el bloqueo de los incentivos al consumo de carbón nacional en las térmicas han vuelto a desembocar en un nuevo corte de tráfico por parte de mineros, en concreto en la carretera CL-631 Ponferrada-Villablino.

El suceso tuvo lugar en el punto kilómetrico 31, a la altura de la localidad de Santa Cruz del Sil, y consistió en el volcado de la carga de un camión, al igual que ocurrió el pasado lunes en Laciana con dos camiones que transportaban carbón de importación camino de la central térmica de Compostilla.

Con éste son tres los problemas de comunicación causados por las protestas mineras en la provincia, después de que ayer miércoles se tuviera que interrumpir el tráfico ferroviario por espacio de siete horas al quemarse carbón y neumáticos en la vía férrea a la altura de la localidad de Ciñera, además de provocar igualmente problemas en la carretera Nacional 630.

Nuevamente, con este tipo de actos de protesta los mineros reclaman con urgencia al Gobierno central la aprobación del Decreto que garantice el consumo de mineral nacional en las térmicas y que permita la pervicencia de las explotaciones de la provincia.

Quejas de la Patronal los transportistas

La Federación de Empresas de Transporte de Mercancías por Carretera de Castilla y León (Fetracal) mostró hoy su “preocupación y malestar por las consecuencias que para el sector en esta comunidad autónoma está generando las medidas que adoptan piquetes de la minería de León”.

El colectivo recuerda que en las últimas semanas piquetes mineros han volcado camiones que transportaban carbón a diversos puntos de las provincias leonesa y palentina. Desde Fetracal, apuntan, no se valora el origen de la protesta pero sí las consecuencias que genera a los transportistas de Castilla y León “que sólo realizan su trabajo, es decir, transportar una mercancía de un punto de origen a otro de destino”.

Los transportistas, añaden, no son responsables de ninguno de los problemas que salpican a la minería de León y de Palencia. Son, en la mayoría de los casos -recalcan- autónomos, pequeños empresarios o trabajadores por cuenta ajena, que hacen su trabajo y nada tienen que ver con el conflicto minero.

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