León se queda sin 'La Bicha'
No había quien le soportara... pero todos iban a consumir la mejor preparación de morcilla leonesa de la ciudad (y posiblemente de la provincia). Sus bufidos y gruñidos no evitaban que el bar 'La Bicha' estuviera a reventar... cuando estaba abierto, porque como bien decía un cartel a la entrada: “Abro cuando vengo y cierro cuando me voy y si vienes y no estoy es que no hemos coincidido”; uno de tantísimos que llamaban la atención según entrabas (dejando claras sus intenciones, al menos su regente, Paco, iba de cara). Sus bocadillos tamaño antebrazo eran también míticos y ningún leonés dejó de recomendar ir a probar la morcilla de 'La Bicha' a cualquier visitante de la ciudad.
De los primeros que prohibió fumar en el bar antes de que fuera obligatorio, la reprimenda cuando un despistado encendía un cigarrillo era 'gloriosa'. Huraño y gritón, sin embargo tenía una mano en la plancha que se hizo leyenda. Incluso Carlos Herrera le denominó el “camarero más borde de España”... pero recomendaba encarecidamente ir a probar sus manjares.
Pero todo tiene su final. El día de nochebuena muchos de los leoneses que regresan a su tierra por estas fiestas vieron cómo el edificio que albergaba 'La Bicha' estaba demolido y el bar cerrado. Sólo queda la fachada del inmueble de al lado, el del antiguo bar Chivani, que lleva años rodeado por la valla que se decoró con un espectacular grafiti.
Y es que Paco, el regente del bar era todo un personaje en León. Muchos de sus visitantes consiguieron la “medalla al honor del Húmedo” recibiendo alguna bronca de él; pero la gran mayoría volvían. Pobre del que pidiera un Rioja o un Ribera: “¡Aquí sólo hay vinos del País Leonés!” o el que pidiera media ración: “Yo se la pongo entera y usted verá lo que hace”. Hasta el punto de que los más cachondos mandaban a los novatos a solicitar alguna de esas viandas para verle reaccionar... y reírse del incauto.
Admiración por su morcilla en los blogs culinarios
Sin embargo, la búsqueda en Internet de 'La Bicha' ofrece siempre la misma sensación, los blogs de gastrónomos hablan de su mal carácter... y de sus increíbles propuestas culinarias. En el blog de viajes 'El Lobo Lobo' lo definen así: “Es un local muy pequeño, incómodo, diría que agobiante. El jefe del local, el señor don Paco, mientras que pone las tapas habla solo, de su particular revolución, se mete con todo Cristo, y pega gritos entre el jaleo de la gente que abarrota el local. Es la esencia del tapeo leonés, las cañas de vino o cerveza, el chorizo, y sobre todo la joya de la corona: la morcilla de León”.
En 'Pantagruel Supongo' también tienen su homenaje: “Y ése fue el instante del prodigio, de la perdición. Lo demás fue confuso: entre vaporosas neblinas, recuerdo cómo inmediatamente pedimos una ración de morcilla; recuerdo cómo la extendían por la plancha, su intenso olor según se iba calentando; las hogazas de pan recién tostado para untarla; los estudiados improperios del propietario al personal allí apiñado; la carrera a la Iglesia, recién salida la concurrencia, para secuestrar a los más allegados y sumirlos - todavía sorprendidos - en el embrujo de La Bicha; los carteles soeces, cutres; más raciones de morcilla y más hogazas horneadas con el oro negro, humeante, desparramado”.
Incluso la bloguera de iLeón, Irma Basarte, de 'La Utopía de Irma' supo ver el lado más humano de Paco, que no todos aceptaban (mucha gente no volvía): “Su gran jefe... pues el gran Paco, que como es su garito es la República independiente de su casa y manda él, así que él impone sus reglas y el que quiera bien y el que no pues ya sabe lo que tiene que hacer (hay un cartel que lo aclara todo). Ese mal genio del que se quiere hacer característico, guarda una enorme sonrisa, que dicho sea de paso es bonita, debe ser que sonrie poco el joio, sólo con quien quiere y cuando quiere y hace bien, que coños”.
Paco, todo un personaje. Cuenta su leyenda que hace unos años echó a la nieta de Franco de su local (Carmen Martínez-Bordiú, en una de sus frecuentes visitas a León), al grito de: “No venga usted a joder, que ya nos jodió bastante su abuelo”. Desde luego genio y figura.
Hasta tal punto era famoso por su “mala leche” que incluso ha sido 'meme' estas navidades con una foto suya en la que se aseguraba que sólo él y nadie más había conseguido “expulsar a Chuck Norris de su local” (en Internet este actor es como un dios que todo lo puede). Pero al final ha echado el cierre de 'La Bicha' por derribo. Y es que por desgracia para algunos sólo algo así podría haber terminado este mítico local en el que cuando había mucha gente el dueño cerraba la puerta para que no hubiera “avalanchas”.
Eso sí, hay gente que al conocer la noticia aún no se lo cree y piensa que volverá a abrir. Ojalá, porque para muchos el recuerdo de León se queda en 'La Bicha' como “el camarero más borde” pero las raciones más admiradas. Y porque si había alguien capaz de echar a Chuck Norris de un bar sólo era él. De eso ninguno que lo haya conocido tendría duda.
