Fallecen dos ciclistas tras ser arrollados por un conductor ebrio que se dio a la fuga en Matallana de Valmadrigal
Un matrimonio falleció y su hijo de 12 años resultó herido tras ser atropellados por un turismo que se dio a la fuga mientras circulaban en bicicleta en el kilómetro 293 de la N-601, en el término municipal de Matallana de Valmadrigal.
Una llamada de alerta a la sala del 112, indicó que un el turismo había atropellado a tres ciclistas y había abandonado el lugar, a pesar de que dos de los ciclistas se encontraban heridos de gravedad.
Hasta el lugar del suceso se desplazaron, la Guardia Civil de Tráfico, un helicóptero medicalizado, una ambulancia de soporte vital básico del Sacyl, una unidad medicalizada de Emergencias de Sacyl y el médico de atención primaria del centro de salud del municipio.
El equipo médico confirmó a su llegada el fallecimiento de dos ciclistas y ordenó el traslado del menor herido al Complejo Asistencial de León.
Por su parte, la Guardia Civil consiguió localizar al conductor del vehículo cerca de Mansilla de las Mulas, a unos 17 kilómetros del lugar del suceso, donde se le realizó una prueba de alcoholemia en la quintuplicó la tasa permitida, tras lo que se procedió a su detención.
El alcalde de Santa Cristina de Valmadrigal, municipio al que pertenece Matallana de Valmadrigal, Ceferino Revilla, explicó que las víctimas eran una familia de Guipúzcoa que se encontraban realizando en bicicleta en Camino de Santiago y que esta misma mañana había coincidido con ellos en el bar de la localidad.
Según los datos aportados por el alcalde, el detenido, que conducía un vehículo de la marca Audi, residía en León capital y en el momento del suceso se dirigía a Valladolid, ya que se trata de un empleado de la planta de Renault.
En el momento de su detención, el conductor prácticamente quintuplicaba la tasa de alcoholemia permitida, ya que tras realizarle la prueba dio un resultado de 1,16 mililitros por litro en aire espirado, lo que hace que “no se pueda hablar de despiste, sino de una falta gravísima”.
Revilla señaló que “posiblemente el niño fuera delante del matrimonio, de manera que al atropellarles el coche por detrás quedó protegido por sus padres”.
