Vestas cerrará su fábrica en Villadangos antes de un mes y producirá en Rusia, China y Argentina

Protesta trabajadores Vestas frente a la Delegación de la Junta en León.

Miriam Badiola / ICAL

La empresa multinacional de componentes eólicos Vestas comunicó en la tarde de este lunes al comité de empresa de la plantilla de la fábrica ubicada en Villadangos del Páramo el cierre total de la planta leonesa en un plazo de 30 días a partir este viernes y el traslado de todas sus líneas de producción a Rusia, China y Argentina, según informó a ICAL el miembro del comité Pablo Martínez.

La propia compañía, en un comunicado oficial emitido hoy, confirma que como consecuencia de “desarrollos del mercado” y para “mantener su competitividad”, la firma “tiene la intención de dejar de producir en su fábrica de montaje en León, España, que afecta a todos los 362 empleados de la fábrica”, según cifra, aunque con las contrataciones temporales de otros años la plantilla superó en ocasiones los 600 trabajadores, replican fuentes del comité de empresa.

“Los empleados han sido informados sobre la intención de dejar de producir a través del comité de empresa local y también recibirán una carta de Vestas con información sobre la situación y los datos de contacto para obtener más información”, continúa esa comunicación oficial.

La empresa añade que “según la Ley española, Vestas ahora iniciará negociaciones con los comités de empresa locales para todos los empleados afectados”. En este sentido, “está explorando oportunidades para trasladar a los empleados de León a otros sitios de fabricación y servicio de Vestas en España, así como a las oportunidades fuera de Vestas a través de un plan de recolocación”. “Se espera que las negociaciones se finalicen dentro de los 30 días posteriores al inicio, según lo prescrito por la legislación española”, confirmando así ese plazo de un mes a partir de este próximo viernes.

La noticia llegó hoy a los trabajadores tras más de un mes de huelga, que pretendían mantener en un principio hasta el 31 de agosto, después de que la compañía manifestara su intención de cerrar cuatro de sus siete líneas de producción en este mes de agosto y una más en 2019, que trasladaría a China y la India.

Desde que la empresa hiciera público este anuncio, la plantilla desarrolló un amplio programa de movilizaciones para tratar de impedir el cierre de la empresa y la deslocalización de las líneas de producción, mediante paros parciales, huelga indefinida, manifestaciones en León y Madrid e incluso el encierro de tres trabajadores en la sede de Trabajo de León.

En el día de mañana, el comité de empresa, que aún se encuentra reunido, tenía previsto reunirse con los consejeros de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, y Emprelo, Carlos Fernández Carriedo, reuniones previas al encuentro que el Gobierno había anunciado con responsables de la multinacional.

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