El asfaltado de la desastrosa autovía León-Benavente se paraliza hasta 2019 por el frío
No es que precisamente estos días hayan caído las temperaturas hasta la helada, ni mucho menos. Pero resulta que hace ya varios días que con la excusa del frío se han paralizado las obras de asfaltado de una de las carreteras más deterioradas y que más críticas ha suscitado en los últimos meses, la autovía A-66 en el tramo León-Benavente. El problema es que se anuncia que este 'frenazo' en las obras se mantendrá hasta bien entrado el año 2019, en el momento en el que “mejoren las condiciones climáticas”
La León-Bevanente es una vía que genera a partes iguales indignación entre los conductores y que agudiza el ingenio en las redes sociales, a cuenta de un trazado repleto de peligrosos baches, cuarteos y agrietamientos, que hace ya meses obligó al Ministerio de Fomento a imponer una limitación, no menos criticada, de velocidad establecida en un máximo de 100 kilómetros por hora.
Los trabajos se habían iniciado el pasado mes de agosto y a lo largo de este tiempo se ha ido procediendo, con cortes intermitentes en la doble vía, desviando el tráfico por el carril contrario, a reformar íntegramente el asfalto a lo largo de un total de 8 kilómetros.
Esa es la única extensión en la que ahora los conductores que viajan en sentido León pueden recuperar una conducción normalizada, porque de momento no continuará en el resto del amplio tramo de los 53,22 kilómetros totales que contemplaba el proyecto del Ministerio, con un coste de 6,8 millones de euros. Y eso que el plazo de ejecución se había estimado oficialmente en 21 meses, lo que ya sin contar con el nuevo parón ampliaba hasta la primavera de 2020 la culminación de los trabajos.
Además, queda aún pendiente por parte del Gobierno la licitación de las obras de la calzada izquierda, es decir, la que va en sentido Benavente. Y mientras, el Ministerio de Fomento de momento ha avanzado que para el año 2019 está prevista la salida a licitación también del tramo dentro de la provincia de Zamora, que había quedado incomprensiblemente fuera de los planes de reparación en esta primera contratación leonesa.
