León participará con al menos 10 autobuses en la gran manifestación en Valladolid por la Sanidad pública

Rubén Darío y Carmen Franganillo en la rueda de prensa.

#NosDueleLaSanidad. Bajo este lema, un año después de la gran manifestación contra la política sanitaria de la Junta de Castilla y León, la provincia leonesa volverá a volcarse previsiblemente este próximo sábado 26 de enero en una nueva cita de protesta que se espera nuevamente masiva y que tendrá lugar en la Plaza de Colón de la capital vallisoletana a favor de la Sanidad.

De León partirán, al menos, unos 10 autobuses que están fletando gratuitamente las diferentes plataformas por la Sanidad pública, universal y gratuita tanto de León como de la comarca del Bierzo o Astorga, una caravana a la que se sumará con fuerza el Partido Comunista, que hoy ofreció una rueda de prensa para explicar los motivos de una “lucha” contra el actual “caos asistencial y sanitario” en la provincia leonesa, una situación que tildan de “dramática” y cuya finalidad es, a su juicio, el desmantelamiento “premeditado” del actual sistema olvidando que “la Sanidad pública es del pueblo, no de los gobiernos”.

Así se expresaba Carmen Franganillo, que junto a Rubén Darío, explicaron las causas de su activa participación en esta nueva protesta el 26 de enero, tanto del PCE como de la Unión de Juventudes Comunistas. En su radiografía, destacaron que en los últimos años hay “más listas de espera y más recorte de personal sanitario y de material” que se une a un “goteo de dimisiones de personal médico” por las condiciones laborales, con consultas de 6 minutos y más de 60 pacientes al día por médico, destacaron.

Franganillo censuró que la deuda sanitaria se haya “multiplicado por once en los últimos diez años”, mientras el PP en la Junta “cierra plantas y deriva a miles de pacientes a la sanidad privada”, poniendo como ejemplo el último acuerdo de 11 millones de euros para financiar al Hospital San Juan de Dios en León capital.

Por su parte, Darío remarcaba que a todo esto hay que sumar el cierre constante de consultorios médicos rurales o la pérdida de profesionales de pediatría que hacen que algunos informes, como uno de Amnistía Internacional, certifiquen que “todo esto al final afecta a las rentas más bajas”.

Por todo ello, además de animar a la participación en la manifestación de Valladolid el 26 de enero, exigieron al Gobierno la derogación de la Ley 15/97 que a su juicio favorece las privatizaciones, solicitaron implementar la política de género para dejar de plantear “la feminización de la profesión médica como un problema más”, así como anunciaron que pelearán por dejar participar a las plataformas y colectivos afectados en los Consejos de Salud, “con voz y con voto”, y no como hasta ahora.

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