Silván no cumple obras prometidas en San Claudio pero alardea del balance de su gestión en los colegios de León

Patio del colegio San Claudio. Foto de Secundino Pérez.

“Dentro de la campaña electoral que se ha iniciado, el AMPA del colegio San Claudio ha recibido un correo electrónico con un remitente sorprendente (y no sólo porque sea el primero en unos cuatro años), nuestro Alcalde, Antonio Silván.

Le agradecemos profundamente el detalle de su misiva, que esperábamos que quizá contuviera la fecha de comienzo del ansiado asfaltado del patio del cole, el presupuesto de arreglo de la valla, el prometido proyecto para sustituir el tejado del edificio y acabar por fin con las goteras o, ¿por qué no soñar? ¿una renovación de nuestro salón de actos digno de Cuéntame?

Sin embargo, lo que se nos remite desde la calle Ordoño no es otra cosa que un balance sobre la gestión municipal de estos últimos años. En él se recoge que se han efectuado ni más ni menos que 1.700 intervenciones en los colegios y escuelas infantiles....que no es por dudar de la cifra, tan redonda y aparente, pero nos inquieta enormemente que las hayamos notado tan poco, D. Antonio.

Buscando el (inexistente) apartado del “pasivo” puesto que de un balance se trata, pensábamos que quizá allí se explicaría por qué unas obras, prometidas y esperadas como el agua de mayo que cae hoy en León, ni están ni se esperan; o por qué el Ayuntamiento como único argumento nos ha colgado el cartel de “no hay billetes” cuando las mismas ya estaban presupuestadas y licitadas.

Allá por el mes septiembre, comenzando este curso, se convocó por su concejala Ana Franco una reunión a la que asistieron AMPAS y colegios públicos. En ella se comprometió una partida para diversas obras de albañilería que, en nuestro caso, y suponemos que en el del resto de coles afectados, son más que urgentes.

Pero no hay pasivo en su balance, Sr. Silván, sólo agradecimientos, sonrisas y promesas. Y mientras los padres y madres, los profesores y trabajadores del colegio, seguiremos pintando las paredes, arreglando desconchones, aportando materiales y lo que haga falta. Llenando un vacío vergonzoso en su gestión. También, por qué no decirlo, seguiremos soportando tasas municipales desorbitadas por la cesión de unas vallas y unas sillas si queremos celebrar el magosto, o por un escenario para las fiestas del colegio, por ejemplo. Pero eso no aparece en su bonito pdf.

No pretendemos enredarnos en una cuestión política o partidista, no lo entienda mal, para nosotros la educación no es un tema político más; sus compañeros de gobierno y los partidos de la oposición tampoco han mostrado mucho más interés por el abandono que sufren los edificios que albergan la escuela pública, la escuela de todos.

Así que ahora nos toca a nosotros responder la carta, en forma de sobre y el próximo 26 de mayo...y ojalá pudiéramos escribírsela a alguien que se acuerde de nosotros antes de que llegue mayo de 2023“.

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