'El 8 de abril en tiempos de coronavirus'

Bandera del pueblo gitano romaní

María Hernández

En los 49 años que se lleva celebrando el Dia internacional del Pueblo Gitano, desde aquel Congreso en Londres donde se instauró nuestra bandera y el himno Gelem, Gelem ( Anduve, anduve) no hemos vivido una celebración del 8 de abril más extraña.

Celebrar el orgullo de existir en tiempos de pandemia, con tantas partidas de familiares en estos días, las preocupaciones por los que están enfermos y las necesidades básicas sin solventar en la mayoría de los casos no es nada fácil.

Sin embargo y a pesar de todo, creo firmemente que será la celebración más sentida. Por el orgullo de ver como en nuestros barrios nos estamos cuidando y organizando para que, en la medida de nuestras posibilidades y medios, nada nos falte. Por como nos hemos cuidado y nos seguimos cuidando ante los ataques racistas y de antigitanismo que estamos viviendo en plena crisis sanitaria, con audios que transmiten bulos incendiarios y desmentidos hasta por la Guardia Civil.

Celebraremos este día sabiendo que, como dice Juan Gimenez, “éste país tiene un problema endémico para reconocer el racismo en sus políticas públicas, en su mirada social, en su construcción de identidad.Y los propios sufrientes tienen un problema todavía mayor para aceptar que no son vistos como iguales por el resto.”

Aprovechemos este tiempo encerrado con nuestros mayores para saber su historia, para que podamos contarlas desde la primera persona, sin construcciones ajenas, romantizadas y casi lorquianas de quienes somos, de la lucha de nuestros antepasados y de nuestra propia identidad.

Será la celebración más reivindicativa de los de los de los últimos años, en esta no nos van a usar para poner color en la foto,será en nuestros balcones, sacando nuestra bandera con el azul del cielo y su verde de las praderas y esa rueda roja que simboliza la libertad tan ansiada. O poniendo banda sonora, quizás los Chorbos y su Pueblo Gitano o cualquier cante de La Niña de los Peines que es pura enseñanza.

Y cuando todo esto pase, tened en cuenta que estaremos en las calles reivindicando todo lo que en plena crisis estamos pasando. Que no olvidamos que nuestros niños y niñas no pueden seguir las clases porque no tienen los medios para ellos y el sistema educativo que ya les expulsa les va a dejar mucho más tirados. Ni que la mayoría de los Ayuntamientos no han quitado las Tasa de Ocupación de la Vía Pública cuando no hay mercados. Ni que la reprentatividad del Pueblo gitano queda relegada a los días señaladicos en el que la foto es necesaria para parecer, justificar y seguir “jallando”.

Reivindicar también es orgullo de ser Pueblo Gitano y no quedará solo en el 8 de abril, ni en las ventanas y balcones.

Pero, de momento, quédate en tu ker (casa).

Opre Roma

María Hernández, Camelamos Naquerar

Etiquetas
stats