Ecologistas en Acción rechaza que se permita la caza sin que se justifique su necesidad
Ecologistas en Acción expresó su rechazo a que se permita la caza, a su juicio una “actividad lúdica”, en este momento de estado de alarma por la crisis sanitaria ante la necesidad que alega la Junta de que se controlen las poblaciones de algunos animales salvajes que causan daños a cultivos o la cabaña ganadera.
“No podemos aceptar que se permita una actividad lúdica (un deporte que así lo definen los propios cazadores) sin aportar datos e informes que justifiquen su necesidad real más allá de peticiones y reclamaciones del lobby”, manifestó en un comunicado la portavoz de Ecologistas en Acción, Carolina Martín.
Así respondió a la consulta hecha por el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, a la Delegación del Gobierno y al Ejecutivo central sobre la posibilidad de que en condiciones de seguridad se realice algún tipo de control sobre algunas especies.
Ecologistas sostuvo que la Junta debe “cejar en el intento de volver a declarar la actividad cinegética como prioritaria”. “La presión de determinados colectivos, que apenas representan un tres por ciento de la población castellana y leonesa, no pueden suponer un menosprecio al esfuerzo de la ciudadanía para mantenerse confinada y a la seguridad sanitaria de todas y todos”, apostilló.
Asimismo, el colectivo conservacionista denunció que se están repartiendo precintos de corzos sin ser que sea a su juicio una especie que cause ningún tipo de daño a cultivos. “Por tanto debemos concluir que los supuestos daños no existen y que el interés único y real es salir a cazar, a pegar tiros, pues que lo digan claro”, dijo.
Para evitar los daños a cultivos, Ecologistas en Acción propone que se realicen informes “rigurosos e imparciales” sobre daños y que se publiquen; que se extienda la instalación obligatoria de medidas de autoprotección como las mallas conejeras, “de eficacia probada”; que se dejen de autorizar y sostener la suplementación alimentaria a jabalíes y otras especies en cotos de caza mayor y que se prohíba su importación“, que se respeten en los campos de cultivo zonas que sirvan de cobijo y para la alimentación natural de las especies en las lindes, bosquetes y arroyos, y que cese la caza y el control de los predadores naturales que a su juicio ”sirven para equilibrar las poblaciones de especies silvestres“, como el zorro para el conejo o el lobo para el jabalí.
