Silván afea ahora al Ayuntamiento de León gastar dinero en rediseñar la carretera que dejó en Ordoño II

Recreación aireada por el PP y basada, según admiten, en "rumores" vecinales para Ordoño II.

C.J. Domínguez

Ordoño II, la arteria principal de la capital leonesa, vuelve a primera línea de la política municipal. Y esta vez la trae el Partido Popular, el mismo partido que ejecutó la última reforma de esta avenida con la polémica inversión de 429.000 euros cuando era alcalde el popular Antonio Silván para transformarla en una carretera asfaltada en vez de adoquinada, como llevaba desde la construcción del aparcamiento subterráneo.

Ahora, es el propio Silván el que ataca al nuevo equipo de Gobierno, que dirige el socialista José Antonio Diez, quien ganó las elecciones abogando, entre otras cosas, por semipeatonalizar Ordoño II. Y el exregidor lo hace mostrando lo que el PP denomina una “idea orientativa” que intenta “supuestamente” plasmar el planteamiento de colorear la actual zona de asfalto.

Una actuación que, sin presupuesto oficial conocido, su grupo cifra en medio millón de euros. “León no puede gastar 500.000 euros para pintar Ordoño de colorines y menos en estos momentos”, resume el ahora líder de la oposición y senador Silván.

El Grupo Municipal Popular pide a través de una nota de prensa al alcalde José Antonio Diez “que no gaste” esa cifra en urbanizar nuevamente la calle “en estas circunstancias económicamente tan adversas”. Un proyecto que, aunque no se ha dado públicamente a conocer, que conste, ellos aseguran “está finalizado y el alcalde lo tiene sobre la mesa”.

“Los vecinos se están movilizando”

Censura Silván que el planteamiento “no ha tenido en cuenta las aportaciones ni las opiniones de los vecinos y comerciantes leoneses, y muy especialmente de los de Ordoño y calles adyacentes”. Explican que este nuevo proyecto “jalonaría Ordoño II de figuras geométricas y colores, un diseño cuanto menos polémico que destrozaría la imagen del centro urbano” y contra el que se limitan a asegurar que “los vecinos se están movilizando”.

Pese a todas estas críticas, en su propia información el PP admite que su grupo “sigue sin obtener información del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de PSOE-Podemos sobre sus intenciones de peatonalizar Ordoño II y Alcázar de Toledo”, y por lo tanto no conocen, al menos oficialmente, “presupuesto, diseño o plazo de ejecución”.

Y parte de las quejas que aseguran recibir son “sobre la falta de noticias sobre este proyecto”, y más “en medio de unas crisis sanitaria y económica sin precedentes en la historia de este país”.

Mejor en los barrios

A juicio de Antonio Silván, “la situación económica del Ayuntamiento en estos momentos no permite derroches de dinero” y cree que “la reducción de ingresos” que deja la crisis “hace que deban atenderse las necesidades más urgentes en los barrios y dejar el centro funcionar con eficacia”.

Silván ha insistido en que León tienen que luchar ahora por proteger a sus vecinos y apoyar a sus comerciantes: “Tenemos que prestar toda la ayuda posible a los vecinos porque las cifras no pueden ser más alarmantes. La ciudad de León ha pasado de tener en febrero 8.250 parados a cerrar abril con 9.177, 927 más”.

“Supuestos aspectos de la intervención”

El PP admite que se hace eco de “rumores y malestar entre comerciantes y vecinos” que “se han alimentado estos días de confinamiento ante la incertidumbre que vive el futuro del centro de la capital leonesa”. Y la nota de prensa no duda en insistir en que se trata de elucubraciones: “La falta de información hace que estén circulando supuestos aspectos de la intervención, con un Ordoño alfombrado por coloridas formas geométricas”.

Planteado en condicional, con expresiones como “al parecer” o “supuestamente”, el PP tacha el proyecto que afirma desconoce como “polémico” porque “los viales actuales serían levantados para aplicar otros materiales en el suelo con formas de prismas de colores verdes claros, oscuros, azules variados, morados, triángulos, cuadrados...”. La idea, censura, afectaría a “la estética urbana rodeada de edificios protegidos en el PGOU, así como a la imagen de la Catedral que se vería al fondo desde un Ordoño convertido en una especie de ferial de colores chillones o un extraño parque de atracciones”.

Silván, que aunque aficionado a los actos inaugurales no cortó cinta alguna tras su polémica inversión y obras de nueve meses en Ordoño II, remata ahora su planteamiento con un ataque al nuevo alcalde: “José Antonio Diez demostraría, una vez más, la importancia que tiene para él la tan pregonada participación, nada. No solo ha ignorado a los grupos de la oposición, a los vecinos y a los comerciantes, incluso ha apartado nuevamente a la Concejalía de Participación Ciudadana (Podemos), que no ha pintado nada en este proyecto”, concluye.

Una convulsa historia reciente

Hay que recordar que bajo la Alcaldía de Silván, el PP unió sus votos a Ciudadanos para defender a capa y espada, y contra el resto de partidos políticos, un Ordoño sin adoquines, con asfalto, sin un aclamado carril bici y poca presencia verdes en la que, durante más de nueve meses de quejas de hosteleros y comerciantes, se gastaron 429.000 euros.

Y cada intervención acrecentaba esa polémica, como cuando los populares invirtieron otros 6.100 euros en 'tatuar' el escudo de León en el nuevo asfalto, un trabajo que sufrió daños en escaso tiempo por el intenso tráfico rodado. Tras perder en las últimas elecciones, el PSOE cumplió su promesa de empezar a semipeatonalizar esta arteria principal, entre duras críticas del PP, proceso que aún no ha culminado.

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