Astorga y León capital, abocados al cierre de la hostelería de interior la próxima semana

El Burgo con calentadores en el frío de León.

Astorga desde este mismo jueves y León en muy poco tiempo serán, casi con total seguridad, los próximos municipios de la provincia de León en los que la Junta de Castilla y León decrete este próximo lunes la adopción de las medidas extraordinarias para frenar la cuarta ola, sobre todo consistentes en el cierre de los bares en su interior y de los locales de apuestas.

Es decir, que las dos ciudades se unirán a las medidas que ya están en vigor desde este pasado martes en La Pola de Gordón y Villablino, hasta el momento, las únicas localidades en las que se había implantado esta nueva medida restrictiva, de la que libran ahora tanto los centros comercio como los gimnasios y centros deportivos.

La decisión, que se adopta cada lunes, se basa en el hecho de que la incidencia acumulada de casos diagnosticados a 14 días supere los 150 casos por cada 100.000 habitantes, y Astorga ya supera este jueves esa barrera impuesta por la Consejería de Sanidad de la Junta, con 158 positivos. Hace días que, como León capital, continúa subiendo cada día más y a mayor ritmo, aunque en el caso de la capital leonesa hoy aún se libra por apenas 13 casos.

Pero todo parece indicar que la barrera de los 150 casos se franqueará en apenas unas horas y, en todo caso, el próximo lunes estará vencida. Lo que automáticamente supondrá que la hostelería de ambas ciudades, bares, cafeterías y restaurantes, volverá a poder ofrecer sólo a sus clientes la opción de atenderles en terraza.

La segunda población de la provincia, la ciudad de Ponferrada, sin embargo, se encuentra muy lejos de estos parámetros de restricción, aunque crecen también los casos en la tercera localidad más poblada, San Andrés del Rabanedo, que se encuentra a 117 casos por cada 100.000 habitantes y no deja de subir.

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