La urbanización del acceso a León por la avenida Europa ya cobra forma y afecta al tráfico
Una de las obras más anunciadas y esperadas de la capital leonesa, el adecentamiento del acceso sur al casco urbano de la ciudad por la avenida de Europa, desde la llamada rotonda de Carrefour, alcanza ya varias semanas de trabajo y ya deja ver la nueva traza y los nuevos servicios que presentará cuando concluya.
Unas labores que inevitablemente, ahora que se ha cortado un carril de los dos de acceso de la avenida Europa para que se pueda manejar los trabajadores y la pesada maquinaria empleada, está provocando en algunos momentos del día importantes retenciones de tráfico en la entrada a León desde el Alto del Portillo o la Ronda Este.
La obra alcanzará a casi todo el medio kilómetro de longitud de la avenida, que lleva años presentando no sólo un mal aspecto visual sino una carencia de infraestructuras que, por ejemplo, convertía en una peligrosa piscina la entrada a León cada vez que llovía copiosamente, causando incluso accidentes.
Ahora, bajo las nuevas aceras que se ejecutarán donde antes había solo arcén, la empresa contratada por el Ayuntamiento por 160.000 euros también están rematando la instalación subterránea para canalizar toda esa agua e impedir nuevas inundaciones. La reurbanización también contempla mejorar la mediada que separa ambos sentidos y la doble calzada, así como instalar un paso de peatones justo en el medio de la avenida, ahora inexistente. Este paso de cebra será una de las novedades más llamativos porque se ha elegido un diseño en 3D que aparenta sobresalir y obliga a los conductores a aminorar la circulación.
El proyecto, solicitado el pasado año por el grupo municipal de Unión del Pueblo Leonés (UPL) y asumido por el equipo de Gobierno del PSOE en el Ayuntamiento, concluirá con instalación de nuevo mobiliario.
El lugar presentará ya su nueva cara, una vez descartada la ejecución de una controvertida glorieta que defendió ejecutar el anterior alcalde, Antonio Silván, en medio de la avenida que metería el tráfico por el interior del Polígono 10 y que rechazan una mayoría de vecinos, y no sólo por su coste de 123.616 euros.
Y quedará todo listo para que arranque pronto la construcción de más de 200 nuevas viviendas en varios bloques proyectados, y ya con licencia, en el amplio espacio conlidante, un descampado que se usó incluso de recinto ferial y donde se asientan por ejemplo los circos cuando visitan la ciudad, en la esquina contraria al centro comercial de Carrefour. Esa promoción contempla la construcción sobre unos 47.842 metros cuadrados, con más espacio para servicios comunes y zona verde de 7.647 metros cuadrados.
