Una isla cargada de tesoros y activismo cultural en Astorga
'La isla del tesoro', un rincón donde encontrar libros usados, descatalogados, antiguos, raros, curiosos objetos coleccionables, obras de arte, ha abierto sus puertas en la calle Manuel Gullón de la ciudad de Astorga. Este proyecto ideado por Pilar Vega y Néstor Rojas tiene un poso de actvismo cultural para el encuentro de quienes estén interesados en la cultura.
La idea estaba ya casi a punto cuando comenzó la pandemia, pero el estado de alarma impidió su apertura. Ahora, con los vientos más favorables, el islote se abre con un toque diferente, innovador que refleja la pasión de Pilar y Néstor por los libros, “queremos rescatar obras de arte abandonadas en el cementerio de cosas olvidadas y que aquí cobran nuevo valor” para ser exhibidas y vendidas, comenta Néstor Rojas.
El nombre de La isla del tesoro proviene del libro de Stevenson cuya trama sucede en una isla del Caribe, la isla de Margarita, un rincón del que no es ajeno a Néstor Rojas, poeta Venezolano que ha descubierto el tesoro de Astorga, esta islita cultural del noroeste de España. Rojas no llegó a bordo del barco pirata 'La Hispaniola' pero arribó a la costa astorgana donde descubiró el mapa del secreto que la cultura leonesa. Cada cual en esta tienda puede encontrar el tesoro que busca. No es una tienda cualquiera, Pilar y Néstor quieren que sea también un espacio para conversar y dialogar con los autores y sus libros.
En la trastienda del local han diseñado un espacio para los talleres literarios, para las tertulias, para los 'conversatorios'. También hay una larga pared cuya idea es que sirva como galería de arte para aquellos pintores que quieran exponer sin mucho protocolo y de una manera informal.
Ofrecen también estos espacios a las personas que necesitan un lugar para realizar una charla, a los escritores que quieran presentar sus libros, a los pintores para exponer sus obras, a los intelectuales para conversar, también a la ciudadanía. “Esto quiere ser un espacio de la libertad. Se puede venir aquí y tocar los libros, hojearlos, incluso leerlos aquí. Pero sobre todo es un espacio de la amistad, de la cultura, de los libros, de las obras de arte, un espacio de las antigüedades”, comenta Néstor Rojas.
Un espacio en definitiva donde confluyan muchas corrientes artísticas, pensamiento, de tantas modas que pasaron y aquí se recuperan. Es un espacio 'vintage' de lo amorfo, donde no pretenden que todo esté muy bonito, sino que la gente toque, opine. Un espacio que la ciudad necesitaba.
