La Junta licita cuatro depuradoras de agua en la provincia de León por 4,6 millones
La Junta de Castilla y León, a través de la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl), empresa públlica dependiente de la Consejería de Fomento, ha sacado a licitación la contratación de las obras y puesta en marcha de cuatro depuradoras de aguas residuales para las localidades leonesas de Soto y Amío y Carrocera, Cembranos, Magaz de Abajo y Puente de Domingo Flórez.
Los proyectos, que arrancan así los primeros pasos para una inversión que proviene en realidad de la Unión Europea, suma un importe inicial de licitación de 4,66 millones de euros y con un plazo de ejecución de las obras de 12 meses para cuando se comiencen a ejecutar, aún no.
En la actualidad, las poblaciones de Canales, La Magdalena y Garaño, Cembranos, Magaz de Abajo y Puente de Domingo Flórez cuentan con sistemas de depuración obsoletos, cuyos tratamientos no son adecuados y lo que son incapaces de alcanzar los parámetros exigidos por la normativa actual. Para paliar este problema y alcanzar los estándares mínimos de vertido al medio, se construirán cuatro Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales.
En Magaz de Abajo se ha diseñado un tratamiento mediante Filtros Biológicos que dispondrá de etapa de petratamiento, decantación, tratamiento biológico mediante lecho bacteriano o filtro biológico y decantación secundaría estática en una sola línea.
En el caso de Canales, La Magdalena y Garaño, Cembranos, y Puente de Domingo Flórez, la tecnología que mejor se adapta a las características de las poblaciones es la de biodiscos o contactores biológicos rotativos, que cuenta con etapas de pretratamiento, decantación, tratamiento biológico mediante biodiscos y decantación secundaria.
Las cuatro actuaciones también contemplan la ejecución de los colectores de conexión a las redes existentes y emisarios de vertido del agua tratada al cauce receptor. Además, también se actuará para recoger los vertidos de Canales, La Magdalena y Garaño, donde se plantea la construcción de cuatro colectores principales de nueva ejecución, la impermeabilización de un colector y la reposición de otro colector en Canales, todo ello para evitar los actuales vertidos al río Luna.
Las instalaciones incluyen suministro eléctrico mediante paneles fotovoltaicos, para minimizar los costes eléctricos, si bien, deben contar con acometida eléctrica con objeto de asegurar la continuidad del tratamiento en todo momento. Por su parte, las tecnologías empleadas se caracterizan por un bajo impacto visual y reducido coste energético de explotación, mientras que los procesos internos estarán totalmente automatizados, lo que permite su control en remoto.
