Mañueco y Arrimadas reafirman el pacto PP-Cs y niegan remodelar ahora el Gobierno de la Junta
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y la presidenta de Ciudadanos a nivel nacional, Inés Arrimadas, escenificaron hoy la firmeza del pacto entre Partido Popular y Ciudadanos para el Gobierno autonómico que está “más vivo que nunca”, tras el fracaso de la moción de censura que planteó el vencedor de las últimas elecciones, el PSOE.
Ambos negaron la posibilidad de acometer ahora un cambio en el Gobierno de la Junta, en las consejerías, ni para dar paso a la leonesa Gemma Villarroel, líder autonómica, ni para garantizar más estabilidad y gestión de aquí al final de la legislatura, según manifestó públicamente la propia Arrimadas.
Ambos se ciñeron en todo momento al guión de la visita insistiendo en que el pacto PP-Cs ha dado “estabilidad y protección a las personas” durante la pandemia y ha sido “útil y eficaz” para Castilla y León, comprometiéndose a cumplirlo hasta el final de la legislatura.
En la reunión vinieron a centrarse en asuntos comunes, como exigir al Gobierno de Pedro Sánchez un reparto justo de los fondos europeos, en el impulso de las infraestructuras y en la prioridad de la vacunación contra el coronavirus.
“No se pueden repartir a dedo, los fondos europeos tienen que ser justos, objetivos y transparentes”, anotó la presidenta nacional de Ciudadanos, que insistió en la prioridad de “vacunar, vacunar y vacunar”, para lo que demandó al Gobierno central “agilidad y certidumbre”.
Por su parte, el presidente de la Junta incidió en que las infraestructuras no son solo concluir con la ejecución de las autovías o del tren de alta velocidad, sino también con el ferrocarril de mercancías y convencional e impulsar el Corredor Atlántico.
Tampoco quisieron entrar en posibles trasvases de cargos o dirigentes de Ciudadanos hacia el PP, como ha ocurrido en otros territorios, coincidiendo que en “la prioridad no son los partidos sino los problemas de las personas”. Mañueco defendió así que, como dirigente del Partido Popular en Castilla y León, su objetivo siempre es “seducir la mayor número de personas posibles”, así como “gestionar la Junta” y que cuando llegue el próximo periodo electoral “dentro de dos años” se hablará “de esa situación” porque, actualmente, “lo importante no es hablar de nosotros sino de las personas y sus problemas”.
Por su parte, la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, aseguró que “si hay algo que ha quedado claro hoy, es que no hay nadie pensando en las elecciones” sino que el Gobierno de la Junta está “pensando en el empleo, la vacunación, la recuperación de la normalidad y la tranquilidad de las familias”.
“Lo último que se nos pasa por la cabeza es un proceso electoral que es dentro de dos años”, señaló Arrimadas, quien sobre la posible repetición de Francisco Igea como cabeza de lista de la formación naranja señaló que “ya conocen los mecanismos internos de Ciudadanos en estos casos” para elegir a sus representantes.
Pacto antitransfuguismo
No obstante, Inés Arrimadas también se refirió al Pacto Antitransfuguismo, suscrito por una amplia mayoría de partidos con representación en las Cortes nacionales, como documento que “se tiene que aplicar y cumplir”, al considerarlo un aspecto “básico” para garantizar “que se respeta la decisión de los votantes”.
En ese sentido, y preguntada por la marcha de la procuradora María Montero del Grupo Ciudadanos en las Cortes de Castilla y León, manteniendo su acta como no adscrita, Arrimadas aseguró que no pudo hablar “personalmente” con la procuradora salmantina pero recordó que “todos los cargos de Ciudadanos se presentan a las elecciones firmando un documento en el que se comprometen a dejar el acta si dejan de defender al partido”. “Me han enseñado a cumplir lo firmado y espero que ella lo cumpla”, concluyó.
