El pádel, el frontón del S. XXI de los pueblos leoneses

Instalaciones de pádel en Matueca de Torío

Diego Sobrecueva

El boom del pádel en España no ha dejado indiferente a León, en la ciudad es ya un deporte consolidado con varias empresas ofertando instalaciones para este deporte de raqueta. Pero esta afición se ha extendido también por las localidades de la provincia, donde se pueden encontrar pistas incluso en pequeños pueblos con menos de 100 habitantes.

El pádel es el frontón del S. XXI, si en los 70 y 80 las instalaciones deportivas de los pueblos eran frontones, sobre todo en el sur de la provincia, el pádel se ha convertido en la nueva obra deportiva favorita, como puede verse en una sencilla búsqueda en el boletín oficial de la provincia.

Este interés ha llegado hasta el punto de que se llegan a producir recogidas de firmas en la provincia referidas a este deporte. Tal es el caso de Grajal de Campos, donde los vecinos están recogiendo firmas para pedirle al ayuntamiento que construya un frontón y una pista de pádel. También en Villadangos del Páramo, donde este año hubo una recogida en Change.org, que llegó a 73 firmantes, para que se mejorase la iluminación de la pista de pádel.

Pero no todo es un cuento de hadas en la implantación de este deporte. La construcción de estas pistas de pádel tiene un coste asociado de hasta 30.000 euros en función de la situación del terreno y los materiales, según diferentes presupuestos presentados a la Diputación de León en 2017.

El auge del pádel también tiene sus detractores. En la localidad de San Pedro de las Dueñas (Ayuntamiento de Laguna Dalga) se paralizó la construcción de la instalación por una denuncia que presentaron dos vecinos en los juzgados en 2017. La controversia pilló por sorpresa al pueblo, a pesar de que la mayoría del pueblo estaba a favor de la construcción, y la denuncia supuso la paralización de la obra hasta su resolución en enero de este año.

Algunos de los pueblos que han construido pistas de pádel en los últimos años:

Donde sí se construyó la pista de pádel es en Matueca de Torío, una pequeña localidad de apenas medio centenar de habitantes censados. Hace dos años construyeron una pista de pádel que recientemente han cubierto y proyectan cerrar casi completamente. Esta instalación completa una zona de juegos con parque, merederos, un gimnasio de calle y mesas con ajedrez y parchís.

Todas las obras las ha construido y pagado la Junta Vecinal del pueblo, presidida desde hace cinco años por Miguel Ángel López, con parte de los fondos que consiguieron tras la venta de madera de los pinares de los terrenos vecinales. Para el presidente “es una forma de darle vida al pueblo, si los niños lo pasan bien quieren venir todos los veranos pero si no se divierten al final los padres tampoco quieren venir a ver a sus hijos aburrirse”.

La comarca sufre, como muchos otros pueblos, la despoblación y falta de trabajo. “Aquí hay cuatro productores de miel, dos empresas de construcción, los cotos de caza y el bar. El pádel ha generado movimiento durante el verano y ahora que está cubierta esperamos que también en invierno. Había que hacer algo con el dinero acumulado y he creído que era una buena alternativa para el pueblo, de momento está funcionando muy bien”, defiende la inversión el alcalde pedáneo.

El precio de la cancha es de 10 euros por 90 minutos de juego, aunque los jóvenes del pueblo la usan gratuitamente. Para Miguel Ángel López esa es la clave de que se use tanto, “Hay familias y chavales jugando todas las mañanas y por las tardes y las noches viene gente de otros pueblos de alrededor e incluso de León”.

El caso 'Navatejera': cambiar pádel por frontón con un sonoro fracaso

No muy lejos de allí, en Navatejera, han construido también una pista de pádel aprovechando el antiguo frontón junto al polideportivo municipal. La cuestión es que tanto los vecinos como el personal del polideportivo coinciden en que no se usa apenas, “de vez en cuando hay gente en el frontón, pero el pádel lo usan unos pocos y son siempre lo mismos”. En el polideportivo lo atribuyen a la proliferación de pistas en la ciudad de León, “esperábamos que tuviera más afluencia, pero la verdad es que se usa poco”. Esta pista tiene un coste de 14 euros los 90 minutos, pero sigue siendo menor que las tarifas de empresas privadas.

Sin duda estamos ante una gran expansión de este deporte de raqueta, que comienza a rivalizar con el tenis en adeptos y que causa amores y desamores entre los habitantes de la provincia de León. Sin duda seguiremos hablando de él durante los próximos años.

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