El abrazo de Sosa Wagner y Albert Rivera en Asturias
Albert Rivera transmite las mismas ideas que los entrenadores de fútbol que ponen el estilo por encima del resultado. En un acto electoral en Oviedo, el presidente de Ciudadanos ha asegurado este miércoles que no medirá el éxito de su partido por el número de concejales y diputados autonómicos que obtenga en las elecciones del día 24, sino por las medidas que impulsen y la regeneración democrática que consigan a partir del 25. En Asturias, ha asegurado, la competición empieza con buenas perspectivas porque la dirección regional ha dado muestras de “humildad y grandeza” al cerrar un acuerdo con Ignacio Prendes y los críticos que han dejado UPyD para integrarse en una candidatura ejemplar. “Lo que habéis hecho es justo lo que necesita España: valorar lo que nos une, la España constitucional, por encima de lo que nos separa, poner el país por encima del partido”.
Ciudadanos subraya su papel integrador para construir la tercera vía política en España y esa labor comienza por la confluencia del centro. En el patio de butacas del Auditorio Príncipe Felipe, Rivera se ha abrazado con Francisco Sosa Wagner, la primera voz que cuestionó en los órganos directivos de UPyD el resultado del partido en las elecciones europeas y defendió un entendimiento con Ciudadanos. El catedrático estaba sentado junto al asturiano Ignacio Prendes, también exUPyD, en los asientos reservados para los candidatos y los dirigentes de la formación naranja.
Delante de ellos y de unas mil personas –unos dos tercios del afora de la mayor de las salas del recinto—, el líder de Ciudadanos defendió las ideas de regeneración democrática, cambio económico, pactos en políticas esenciales a largo plazo y diálogo generalizado que, en pocos meses, han propulsado a la formación desde su parcela en la política catalana hasta una posición esencial en el tablero del poder en España. Rivera ha repetido que su partido no pactará con nadie a cambio de cargos y ha situado la frontera entre la política del siglo XX y la nueva forma de entenderla en el siglo XXI en el paso de una pregunta (¿con quién vamos a pactar?) a otra (¿para qué vamos a pactar?).
Respeto por la transición
No ha repetido, sin embargo, la idea del relevo generacional con la que tanto revuelo levantó a principios de esta semana. En cambio, durante su intervención en Oviedo, Rivera se mostró respetuoso con el legado de la transición y con lo que el esfuerzo de los españoles ha logrado desde entonces: libertades, progreso económico, un estado del bienestar y la entrada en el euro. “Lo que toca ahora es ser exigentes para cuidarlo”, ha señalado para defender un modelo de cambio sensato y respetuoso con la seguridad jurídica. A su juicio, hace falta rescatar la política y las instituciones del apretón de los dos grandes partidos. Para conseguirlo, ha señalado, el requisito previo de Ciudadanos antes de sentarse en cualquier negociación será la aceptación de su código ético, que prevé listas abiertas y primarias en todos los partidos y el veto a los políticos imputados. En Asturias, el partido aboga por el cambio de la ley electoral autonómica y por la circunscripción única en lugar de las tres actuales.
La oferta de diálogo, asegura, está abierta tanto para el PSOE, con el que las conversaciones sobre la investidura de Susana Díaz en Andalucía no han dado fruto hasta el momento, como para el PP o Podemos. “Nosotros defendemos una España diversa y unida. No vemos a nadie como enemigo”, ha asegurado. “La tercera vía ha llegado a España para quedar, no para hacer de bisagra ni ser la muletilla de nadie”. Por su parte, ha repartido críticas tanto a los populares –“un gobierno agónico que no ha cambiado nada e incluso ha retrocedido”— como a los socialistas por su incapacidad de adaptarse a su nueva situación en Andalucía: “Se acabó el conseguir una mayoría y tratar al resto de los ciudadanos como si no contaran”.
El futuro, ha añadido, es de los dialogantes. En un tiempo sin mayorías absolutas, solo la humildad, la generosidad y los acuerdos permitirán avanzar. Entre los aspectos del programa nacional que ha destacado están un pacto duradero por la educación, una reorientación del modelo productivo hacia actividades de alto valor añadido (promete crear una treintena de institutos científicos y de investigación punteros y repartirlos por toda España) y la lucha contra el paro. Con esos materiales, considera, “Ciudadanos reconstruirá las clases trabajadoras y medias”. Rivera ha cuestionado el legado de Mariano Rajoy, que cerrará la legislatura sin rebajar el paro que recibió de José Luis Rodríguez Zapatero, con la inversión en educación e I+D+I muy alejada de las medias europeas y con 7,5 millones de trabajadores con salarios tan bajos que no les permiten llegar a fin de mes.
