“Es complicado” que el comedor social de la Asociación Leonesa de Caridad reabra el 1 de octubre

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Miriam Badiola / ICAL

La Asociación Leonesa de Caridad presentó este miércoles su balance de actividad del año pasado. El ejercicio de 2019 se cerró con un déficit de 40.417,96 euros, debido a los 410.678,49 euros de gasto, un incremento del 4,3 por ciento respecto a 2018, frente a los 370.260,53 euros de ingresos, un 0,34 por ciento más que en el año anterior.

Así se refleja en el informe del colectivo que presentaron la concejala de Bienestar Social y Juventud, Vera López, el presidente de la asociación, Félix Llorente, y la directora, Esther Soeane, quien apuntó que durante el año 2018 se atendió a un total de 823 usuarios en el comedor social, a los que se proporcionaron 77.866 servicios entre desayunos, comidas, meriendas y cenas, y de ellos 716 hombres, frente a la cifra de 823 registrada durante 2018. La mayor parte de estas personas, 608 proceden de diferentes puntos de España, mientras que 215 son extranjeros.

En cuanto a las problemáticas más destacadas de las personas atendidas en el comedor social, 212 son parados, 136 inmigrantes, 194 toxicómanos, y el resto sufren mendicidad, enfermedad mental o alcoholismo, entre otros. Además, en el albergue durmieron 461 personas, mientras que 107 durmieron en la calle.

En estos momentos, el comedor permanece cerrado debido a la situación derivada del COVID-19, pero sor Esther Seoane señaló que la fecha propuesta para su apertura es el próximo 1 de octubre, aunque “es complicado”, ya que no harán “nada que vaya en contra del proceso que sigue la pandemia”.

En cuanto a los servicios higiénicos que proporciona la Asociación Leonesa de Caridad, que cuenta con duchas, ropero y lavandería, se atendió a 742 personas en las duchas, mientras que se lavaron 1.685 piezas de ropa.

Asimismo, el servicio de ayuda a domicilio con comida diaria y lavandería semanal, a personas derivadas por los Ceas, previo informe y contacto con la trabajadora social del Ayuntamiento de León, para quienes estén en situación de necesidad, se atendió a cinco personas.

Por otra parte, está el reparto de alimentos a familias en situación de emergencia social, que cuentan con la posibilidad de hacer su comida en el propicio domicilio sin acudir al comedor social, por lo que se les facilitan lotes de alimentos para su posterior consumo. En este ámbito se atendió a cuatro familias, que hicieron un total de 19 personas.

La Asociación Leonesa de caridad también atiende el Centro de Acogida para Mujeres Víctimas de Violencia o en situación de abandono, por el que pasaron cuatro mujeres y cuatro niños. Además, en estos momentos convive en el centro un bebé de siete meses que vive ahí desde su nacimiento.

Todo ello es posible, según destacó la directora de la Asociación Leonesa de Caridad, gracias a la colaboración de más de un centenar de voluntarios, “la mayoría de ellos mujeres”, que en estos momentos “tienen miedo, sobre todo por presiones de familiares”.

Por su parte, Félix Llorente, se refirió a la cuestión económica al exponer que “necesidades tenemos a tope, pero como creemos en los milagros seguimos adelante”, en referencia a los 40.417 euros de déficit con los que cuenta la Asociación. “Los pobres son pobres pero no tontos, nosotros lo sabemos y por eso estaremos siempre a su lado”, concluyó Llorente.

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