La Junta de Castilla y León aprueba su limitada bajada de tasas universitaria para el curso 2018-2019

Miriam Chacón / ICAL El consejero de Educación, Fernando Rey

Ical

Los alumnos de las universidades públicas de Castilla y León pagarán 67 euros menos de media en la primera matrícula en el curso 2018-2019 con la reducción de un 5 por ciento de las actuales tasas académicas, según la propuesta acordada hoy por el Consejo de Gobierno de la Junta.

El consejero de Educación, Fernando Rey, explicó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que en la actualidad los universitarios de la Comunidad pagan una media de 120 euros más que en el conjunto de España, que se recortará en 67 euros con la rebaja que se aplicará el próximo curso, hasta dejar esa diferencia en 53 euros.

De esa manera se recoge en el decreto que establece la reducción de un 5 por ciento de los precios públicos para el próximo curso académico correspondiente sólo a la primera matrícula de las enseñanzas de Grado, Máster y Doctorado, después de tres años de congelación y con el que se cumple el acuerdo presupuestario con Ciudadanos.

Según el responsable educativo Rey “sólo” el 45 por ciento de alumnos de familias con rentas más elevadas paga tasas en Castilla y León y más de la mitad no abonan precios públicos al disponer de becas, tanto del Gobierno, complementadas por la Junta de Castilla y León, como de las ayudas al estudio de las propias universidades.

El consejero rebatió que disponer de las terceras tasas más elevadas de España, tras Madrid y Cataluña, haya motivado una fuga de alumnos en las universidades públicas de Castilla y León y aseguró que han recibido más estudiantes de los que se han ido, a la vez que los que han decidido irse fuera lo han hecho precisamente a Madrid y Cataluña en busca de calidad. “Es rigurosamente falso”.

Por otro lado, subrayó que las cuatro universidades públicas de Castilla y León tienen sus cuentas saneadas y un supéravit en tesorería, algo que manifestó que no ocurre en las de las 16 comunidades restantes de España.

“Es pronto para ver el efecto”, afirmó en relación a los puestos que se puede bajar con la reducción de ese 5 por ciento, si bien resaltó que el objetivo estar en la media del país. En relación a que esa rebaja se quede corta, como dicen desde la oposición y la comunidad educativa, Rey la vio “razonable” y recordó que suponen ocho millones que se incorporan a los presupuestos. “Hay que gastar con rigor y con responsabilidad”, indicó.

Por otro lado, defendió que las familias con rentas más altas paguen una parte del coste real de los servicios necesario para mantener el principio de solidaridad y las exenciones a quienes ganan menos. “Sería ideal poner el contador a cero”, se preguntó, para estimar que no sería “justo” y calificar de “populismo” y de “dilapidar el escaso dinero público” medidas como el cheque bebé. “Es justo que quienes tienen más recursos paguen algo más”, resumió.

Exenciones

En la actualidad, los ingresos que perciben las universidades por precios públicos cubren entre el 15 y el 25 por ciento del coste real de las enseñanzas en primera matrícula de modo que la mayor parte de la financiación universitaria se realiza con cargo a los Presupuestos Generales de la Comunidad, destacó el consejero.

Por otro lado, el decreto mantiene la posibilidad de pagar la matrícula de una sola vez, a principios de curso, o fraccionarlo en tres plazos: el primer pago, al formalizar la matrícula; el segundo entre el 1 y el 15 de diciembre; y el tercero, entre el 1 y el 28 de febrero. Además, en aras de la autonomía universitaria y atendiendo a una petición que la Universidad de Valladolid realizó el pasado curso, se sigue incluyendo la posibilidad de que estas instituciones establezcan, si así lo desean, su propia fórmula de pago fraccionado aplicándose el previsto en el Decreto en su defecto.

Igualmente, se mantiene la exención total de los precios por servicios académicos, por una sola vez, en el primer curso de enseñanzas de Grado al alumnado que inicie estudios universitarios y acredite matrícula de honor global en 2º de Bachillerato o ciclo formativo de FP de grado superior; que sea premio extraordinario de Bachillerato o de FP de grado superior; o que haya obtenido medalla en las olimpiadas de Matemáticas, Física, Química, Biología o Economía de ámbito nacional.

Además, este año se ha introducido, como novedad, el derecho a la exención total de los precios para los alumnos que hayan obtenido el Premio Extraordinario de Bachillerato de Investigación/Excelencia.

Asimismo, estará exento del pago de los precios públicos el estudiante que acredite, al formalizar la matrícula o solicitar el servicio, ser una persona con discapacidad, víctima de actos terroristas, miembro de familia numerosa o, por primera vez este año, a los estudiantes que sean hijos de mujeres fallecidas por violencia de género.

Plan de Transferencia Universidad-Empresa con 7,8 millones hasta 2020

Además el Consejo de Gobierno El Plan de Transferencia de Conocimiento Universidad-Empresa 2018-2020 (TCUE) contará con 7.875.000 euros para este nuevo periodo de vigencia, cuyo objetivo es aumentar la relación entre el mundo académico y empresarial para alentar la incorporación del conocimiento en la creación de riqueza y de empleo. Entre sus novedades, se encuentran los doctorados industriales o investigación “hiperaplicada” en función de la demanda e intereses de las empresas.

Aprobado hoy en el Consejo de Gobierno, de su montante total 5.475.000 euros los gestionará la Dirección General de Universidades e Investigación, que incluyen una cofinanciación FEDER del 50 por ciento en el marco del Programa Operativo FEDER 2014-2020 de Castilla y León, y 2.400.000 euros restantes por la Fundación Universidades y Enseñanzas Superiores de Castilla y León (Fuescyl).

Con este nuevo Plan, la Consejería de Educación pretende progresar en las actuaciones desarrolladas con éxito en el plan anterior, avanzando hacia un nuevo modelo integrado, estable y sostenible que forme parte esencial de la planificación estratégica de las universidades de Castilla y León, que generalice los procesos de transferencia entre los investigadores universitarios y que facilite el trabajo de las Oficinas de Transferencia de Conocimiento (OTC) de las universidades castellano y leonesas.

El nuevo plan, como explicó el consejero de Educación, Fernando Rey, se estructura en tres grandes programas: 'Ecosistema Universitario para la Transferencia de Conocimiento', 'Impulso a la Colaboración Universidad-Empresa y la Innovación Abierta' e'Impulso al Emprendimiento Universitario'.

El Programa 1, denominado 'Ecosistema Universitario para la Transferencia de Conocimiento', con una dotación de 3,2 millones, se concentra en el impulso de las estructuras de apoyo a la transferencia de conocimiento universitarias, a promover el desarrollo, protección y explotación de tecnologías propias y también a promover la colaboración y la actividad en red de las universidades de la Comunidad en materia de transferencia de conocimiento.

Entre sus iniciativas destacan planes estratégicos; impulso a las oficinas de transferencia de conocimiento universitarias, colaboración y trabajo en red; convocatorias para realizar, registrar y explotar desarrollos tecnológicos; y difusión y comunicación.

Dentro del Programa 2 'Impulso a la Colaboración Universidad-Empresa y la Innovación Abierta' -con un presupuesto de 1,73 millones de euros-, se incluyen actuaciones orientadas a potenciar la realización de proyectos conjuntos de I+D+i y la innovación abierta, tales como las medidas de apoyo a los proyectos conjuntos universidad-empresa; a los consorcios universitarios para la transferencia de conocimiento; a los doctorados industriales; y al concurso desafío universidad-empresa.

El consejero se detuvo en los doctorados industriales para precisar que se tratará de una investigación “hiperaplicada” en materias que puedan interesar a empresas concretas y con el objetivo de conectar el tejido productivo del entorno para generar empleo y riqueza.

Finalmente, el Programa 3, 'Impulso al Emprendimiento Universitario', concentra las actividades de apoyo al emprendimiento universitario y la creación de 'spin-off' y empresas de base tecnológica (EBT) a través de un sistema de apoyo al emprendedor y de la iniciativa campus emprendedor. La estimación presupuestaria del programa 3 es de 2,86 millones de euros. El Plan TCUE 2018-2020 impulsará estos programas y medidas a través de la Red TCUE.

En cuanto a su tramitación, el plan se ha sometido a participación ciudadana a través del Portal de Gobierno Abierto. Asimismo, se ha dado a conocer a las universidades de Castilla y León a través de los integrantes de la Red TCUE, se ha remitido a todas las Consejerías de la Junta, al Consejo Económico y Social de Castilla y León y ha sido informado favorablemente por el Comisionado para la Ciencia y la Tecnología de Castilla y León.

Resultados

Desde su puesta en marcha en 2008, las universidades participantes han facturado al sector empresarial más de 152 millones de euros en concepto de I+D y consultoría; y han apoyado la creación de empresas, atendiendo a 2.139 emprendedores e impulsando la elaboración de 725 planes de negocio, lo que ha propiciado la creación de 221 nuevas empresas.

Respecto al número de solicitudes de patentes ante la Oficina Española de Patentes y Marcas, las universidades de la Comunidad han presentado 341, a las que hay que añadir 117 solicitudes de carácter internacional, suscribiendo 63 nuevos contratos de licencia. Además, han registrado 377 nuevos programas y aplicaciones informáticas. En esta misma línea, estas instituciones académicas han presentado 1.023 propuestas con empresas a programas internacionales de apoyo a la I+D+i, así como 536 propuestas, también con empresas, a programas nacionales de apoyo a este tipo de actividades.

En la comparación de los promedios anuales del período previo a TCUE (años 2005-2007) con los obtenidos durante su período de vigencia, se observa que la facturación anual por I+D y consultoría ha aumentado en casi un 30 por ciento -a pesar de la incidencia de la crisis económica durante estos años-, que el ritmo anual de creación de empresas se ha cuadriplicado o que el de solicitudes de patentes ha multiplicado su promedio por más de tres veces y media.

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