Habrá doble anillo de seguridad, privada y pública, en la espicha 'electoral' de la Universidad

Una limpiadora, resignada ante los restos del macrobotellón. / Carlos S. Campillo / ICAL

C.J. Domínguez

Doble anillo de seguridad, vallado del recinto, vigilantes de seguridad privada y brigadas de Barrio, Tráfico y Especial de la Policía Local de León estarán plenamente activas en el campus de Vegazana de la Universidad de León cuando se celebre el próximo 7 de abril la fiesta o espicha de los alumnos de la Factutad de Económicas.

Todo ello forma parte del operativo conjunto acordado en una reunión mantenida hoy entre el equipo de Gobierno municipal, y en concreto el concejal de Seguridad Fernando Salguero y el vicerrector de la Uiversidad Luis Panizo, ante la inminencia de la nueva fiesta universitaria, que además concidirá en el mismo día en que se celebrarán las nuevas y polémicas elecciones al Rectorado de la institución académica leonesa, después de la “situación dantesca” y el “desastre” de la última fiesta de Industriales, devenida en “macrobotellón”, como lo denominó el propio Salguero.

El Ayuntamiento descarta la prohibición de estas fiestas, según explicó el edil y teniente de alcalde, “pero deben celebrarse correctamente y sin alterar las condiciones sanitarias, porque no permitiremos el concepto de botellón. Por eso, explicó que por parte de la Universidad de León se vallará todo el recinto donde se celebrará la fiesta el 7 de abril, incluida la comida de paella que han organizado los estudiantes con una empresa de hostelería y la ingesta de bebidas, y todo ello estará controlado por ”vigilancia de seguridad“ privada para garantizar el orden entre las horas permitidas: de la una de la tarde a las diez de la noche.

Estos vigilantes controlarán el acceso de los jóvenes, admitiendo sólo a aquellos con carné universitario. Se trata, según Salguero, de evitar que la juerga se magnifique con presencia de otros jóvenes “venidos de otras provincias” con apoyo de empresas de organización de este tipo de fiestas.

Y en el exterior del Campus habrá otro “anillo” policial municipal que se encargará de controlar el tráfico y los accesos, que pondrá en marcha controles de alcoholemia y de consumo de drogas, así como se pedirá identificaciones a los asistentes para asegurarse, de manera especial, que a la fiesta no acceden menores de edad. Se trata de imponer “una doble seguridad”, resumió.

En cuanto a las labores de limpieza, el Ayuntamiento hará “lo que le corresponde, como siempre”, cual es la limpieza de los accesos y viales externos“, confiando en que el resto del recinto universitario no se convierta en el escenario de basura que fue el último evento de este tipo.

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