Endesa planea usar parte del solar de Compostilla II como almacén logístico para responder al tirón de las renovables

Peio García / ICAL ‘Jornada sobre Transición Energética y Reindustrialización del Bierzo’ que se celebra en León

César Fernández

Endesa está barajando la posibilidad de utilizar parcialmente el solar resultante del desmantelamiento de los grupos térmicos de la central de Compostilla II en Cubillos del Sil para la instalación de un almacén logístico que dé respuesta al previsible incremento de la actividad de la compañía en el ámbito de las energías renovables. La empresa eléctrica ya aclara que esta iniciativa “no será la principal”, puesto que su apuesta para esos terrenos está basada en el proyecto Futur-e que pretende captar inversores y que este viernes fue presentado en un acto público en el Hotel Conde Luna de León. En ese foro, su director territorial para la Zona Noroeste, Miguel Temboury, rechazó las críticas por supuestos agravios comparativos con las inversiones millonarias ya canalizadas en otras latitudes con el argumento de que la térmica berciana no dispone de las horas de sol necesarias para la implantación de una planta solar fotovoltaica.

La posible instalación de un almacén logístico responde a la expectativa generada por el desarrollo del Plan Nacional de Energía y Clima, que prevé inversiones de hasta 60.000 megavatios hasta 2030 en instalaciones solares y eólica. “Creemos que una parte importante se va a hacer en Castilla y León. Y una parte importante la va a hacer Endesa. Va a haber mucha actividad de repuestos, logística y mantenimiento de parques eólicos”, dijo Temboury, que añadió que “lamentablemente” la compañía no ha podido extrapolar (“el recurso de horas de sol y viento no lo ha permitido” aclaró) al Bierzo la inversión de 1.000 megavatios en una planta solar fotovoltaica como la ya prevista para compensar el cierre programado de la central de Andorra (Teruel). “No se trata de hacer un proyecto a pérdida, sino de que haya una actividad que genere empleo y que sea sostenible, no sólo económicamente sino también medioambientalmente”, añadió tras haber esbozado la instalación de un “centro logístico” para canalizar “toda la actividad en energías renovables” de la compañía en España.

Con todo, el directivo de Endesa aclaró que la hipotética utilización propia no será el proyecto principal para una parcela que libera 330 hectáreas, de las que 80 tienen calificación industrial. “Y ahí caben muchos más proyectos”, dijo para presentar el proyecto Futur-e, que se abrió el pasado 8 de octubre con la convocatoria internacional de ideas en un plazo que concluye el 31 de enero, fecha a partir de la cual un comité independiente (formado con el asesoramiento de personal de la Universidad de León) analizará la viabilidad de las iniciativas para ser, en última instancia, negociada su instalación con la propia Endesa.

El ejemplo de Italia

El concurso de ideas es una fórmula que ya ha funcionado en otros países como Italia, donde centrales térmicas se han reconvertido en centros logísticos y turísticos o incluso en una ciudad del automóvil con más de 10 millones de inversión y medio centenar de empleos. “Esta forma de trabajar asegura que encontraremos un inversor que pueda dar empleo en la zona. El volumen de los empleos dependerá de los proyectos que se presenten”, precisó el responsable del Proyecto Futur-e para Compostilla II, Juan Álvarez. A falta todavía de la autorización del Ministerio para la Transición Ecológica, la central térmica berciana sostiene todavía 125 empleos de la empresa matriz y 70 de las compañías auxiliares. “Más no se puede correr”, defendió Temboury al hablar de las gestiones en paralelo para el cierre, el desmantelamiento y la búsqueda de alternativas, por lo que entiende que la protesta sindical “no está justificada”.

Por su parte, el director general de la Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden), Arsenio Terrón, que reconoció que la relación con Endesa es “constante” para “trabajar en común” por soluciones de futuro para una tierra “que se ha hecho acreedora de esa Transición Justa” tras 100 años de suministro de energía que “ahora tienen que verse recompensados”. “Tenemos ideas que van en paralelo con Endesa y otras que serán diferentes. Nos interesa encontrar vías de futuro”, dijo Terrón, responsable de la entidad al que el Ministerio para la Transición Ecológica ha encomendado aplicar esa voluntad en El Bierzo.

A la jornada acudió el director general de Energía y Minas de la Junta de Castilla y León, Alfonso Arroyo, que consideró “positiva” la organización de esta jornada organizada por Endesa para buscar usos alternativos para Compostilla II. “Se van a desconectar más de 1.000 megavatios, una oportunidad importante para El Bierzo toda la provincia de León”, concluyó Arroyo.

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