Los trabajadores de la limpieza industrial de Compostilla se encierran en las oficinas de la empresa por un nuevo convenio

Comienzo del encierro de trabajadores de la empresa auxiliar de limpieza industrial de Compostilla II.

ICAL

Los trabajadores de la empresa Nervión Industries, la subcontrata que se encarga de la limpieza industrial en la central térmica berciana de Compostilla II, intensificaron este miércoles las protestas que están llevando a cabo en los últimos días por el bloqueo de las negociaciones para la firma de un nuevo convenio colectivo. Un grupo de empleados ocupó las oficinas de la empresa, en un encierro que tendrá lugar por relevos y que busca forzar a la empresa a “dar algún tipo de respuesta”, avanzaron fuentes sindicales. Media horas después del inicio del encierro, la Guardia Civil se personó en las dependencias por requerimiento de la compañía.

Tras protagonizar varias jornadas de protesta a las puertas de las instalaciones, la treintena de trabajadores volvió a concentrarse hoy a partir de las 13.30 horas, una acción que se repetirá tanto el jueves como el viernes. Al término de la concentración, los primeros trabajadores se adentraron en las oficinas, de las que no saldrán, avanzaron hasta obtener “alguna oferta económica que no sea la callada por respuesta”, explicó el representante del sindicato de Construcción y Servicios de CCOO en el Bierzo, Alfredo J. Peláez.

Respecto al fondo del problema, los trabajadores reclaman unos incrementos salariales “moderados”, del tres por ciento anual, así como la adaptación del anterior convenio a la ley actual. En ese sentido, Peláez confirmó que el sindicato ya ha presentado diversas denuncias en los juzgados ante la pérdida de derechos por parte de los empleados. En anteriores movilizaciones, los representantes de los trabajadores ya avanzaron la posibilidad de iniciar una huelga indefinida a partir del 13 de enero en caso de que la empresa continúe sin presentar ofertas.

Cabe recordar además que, según fuentes sindicales, el nuevo marco de negociación colectiva se acordó con la anterior adjudicataria del servicio, con la que el convenio centro de trabajo estaba pendiente sólo de la firma. Al producirse, en septiembre del año pasado, el cambio en la empresa que se encarga de la limpieza industrial de las instalaciones, el nuevo convenio quedó paralizado.

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