“Si nuestros aplausos no se oyen, que se oigan nuestras campanas”

Desde la espadaña de la iglesia de de Vegapujín, campanas que sustituyen a aplausos cada tarde a las 8.

“Si nuestros aplausos no se oyen, que se oigan nuestras campanas”. Con este claro mensaje, vecinos de varios pueblños del municipio leonés de Murias de Paredes han impulsado una original manera de dar las gracias a cuantos trabajadores están dándolo todo por luchar en tiempos de la pandemia del coronavirus.

La iniciativa parte de pueblos que viven el aislamiento rural de la que hoy se ha dado en llamar la España Vaciana, como Vegapujín o Torrecillo, entre otros. Pueblos del Valle Gordo con cada vez menos vecinos y sobre todo por culpa de cada vez menos servicios esenciales.

Pero no por ello, como relata su alcaldesa, Carmen Mallo, los habitantes de este municipio leonés son menos a la hora de lanzar los mensajes que cada día a las ocho de la tarde lanzan todos los españoles desde sus ventanas y balcones.

El problema es que en Murias de Paredes son pocos y están alejados. De ahí la idea de hacer repicar las campanas de la iglesia como muestra de solidaridad, de agradecimiento y también para lanzar un mensaje esencial en estos días de confinamiento: Quédate en casa.

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