Majo (PP) no descarta abandonar la política por “decisiones personales”

Martínez Majo esta mañana en la Diputación junto a varios diputados del PP que, como él, han perdido en sus ayuntamientos, como Paco Castañón en Pola o Miguel Ángel del Egido en Santa María del Páramo, entre otros.

Carlos J. Domínguez

Que Juan Martínez Majo continúe ocupando los cargos de alta responsabilidad que mantiene por el Partido Popular en la provincia de León, en calidad de presidente provincial del PP y de la Diputación, depende de “decisiones personales”.

En su primera valoración pública de los resultados electorales de las municipales y autonómicas del pasado domingo 26M, por dos ocasiones Martínez Majo se refirió a esas “circunstancias personales” para decidir su futuro inmediato como líder popular en la provincia. Es más, sin descartar dejar de estar activo en la política. “Ya lo veremos”, quiso zanjar.

Y eso que en su análisis electoral, Majo quiso sacar pecho por uno resultado provincial que a su juicio “no es el que teníamos pero es bueno”. A pesar de que penda de un débil hilo el propio Gobierno de la Diputación, donde se ha perdido la mayoría absoluta, y sea complejo gobernar en los ayuntamientos más grandes de León, como en la propia capital, Ponferrada, San Andrés del Rabanedo o Villaquilambre, por mencionar algunos.

Su valoración tendió a ser positiva cuando ese “buen resultado” lo cifró en que “el PP subió de 68.000 a 80.000 votos y el PSOE bajo de 94.000 a 91.000” y “tenemos más mayorías absolutas, más número de concejales y más ayuntamientos que ningún partido, especialmente en el mundo rural”, recordando que “la Diputación es la casa de los municipios de menos de 20.000 habitantes”.

A pesar de esas cifras, y de que “de momento no hemos perdido nada” de estos grandes municipios, porque están por negociarse y cerrarse posibles pactos de gobernabilidad, sí quiso hablar de “autocrítica” matizada, estimando que “estoy a absoluta disposición del partido”, tanto del presidente regional, Alfonso Fernández Mañueco, como del nacional, Pablo Casado, y siempre anteponiendo aquellas “decisiones personales” que pueda o no adoptar.

Donde sí fue más duro consigo mismo fue en el Ayuntamiento de Valencia de Don Juan, en el que ha gobernado los últimos 24 años, y que ahora ha perdido al conseguir el PSOE la mayoría absoluta que él ha ostentado durante tantos años. “Asumo como propia la derrota”, aseguró, felicitando al próximo regidor, analizando posibles “desgastes personales” sufridos y confirmando que tampoco esa pérdida le supuso una sorpresa, porque era una situación “no previsible pero sí posible”.

En todo caso, con el PSOE en la Diputación leonesa sumando 12 diputados provinciales, uno de UPL y otro de Ciudadanos, los 11 del PP se antojan insuficientes, ya que requeriría un triple pacto. “Es complicado mantener la Diputación pero nos abrimos a todas las posibilidades, estamos legitimados y daremos el paso”, anunció, añadiendo que esta negociación se ejercerá por su parte “como en estos cuatro años” de mayoría absoluta“ con ”objetividad y transparencia“ y alcanzando ”el 99,5% de los acuerdos por unanimidad, sin imponer absolutamente nada“.

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