El consejero Rey abandonó la Junta incumpliendo promesas y plazos para el nuevo Conservatorio de León

Varios alumnos exigen al hoy exconsejero de Educación, Fernando Rey, la retirada del proyecto de traslado del Conservatorio al estadio de fútbol.

C.J. Domínguez

En abril de 2016, hace ya más de tres años, la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de la capital anunciaron a bombo y platillo una solución definitiva para que el Conservatorio Profesional de Música de León dejara de estar en precario en su sede de Santa Nonia, edificio propiedad de la Diputación leonesa: trasladarlo a la 'barriga' campo de fútbol Reino de León.

La ocurrencia tardó apenas 24 horas en concitar el rechazo unánime de todos salvo el PP, que gobernaba en Valladolid y en León, incluido Ciudadanos, que había dado de palabra su visto bueno inicial. Una tensa reunión en el propio Conservatorio con toda la comunidad educativa musical y la presión de una gran manifestación puso la puntilla a una decisión política que había encabezado activamente un leonés, el consejero de Educación, Fernando Rey, secundado por el alcalde Antonio Silván.

Pocos días después de defender ambos a capa y espada la idoneidad de ese traslado “idóneo” y “excelente”, la presión surtió efecto y Rey acabó cediendo, comenzando entonces un periplo administrativo para ejecutar una nueva sede en el que el ahora exconsejero del Gobierno autonómico de Herrera ha ido encadenando incumplimientos que han acabado por dilatar aún más una solución digna para el Conservatorio leonés, junto a Zamora la única capital que no dispone de una sede nueva.

En una de sus últimas declaraciones antes de abandonar la Consejería, Fernando Rey puso como tope el mes de junio de 2019 para contratar las obras del nuevo edificio en un solar del barrio leonés de La Palomera.

El de menor inversión

Pero tampoco cumplió, a pesar de ser el proyecto de menor inversión de la Junta de todas las previstas en obra nueva de la Consejería de Educación, ya que los seis millones previstos para León son muchos menos que los 10 millones anunciados para el Conservatorio de Zamora o los 9,1 millones de la nueva sede de la Escuela de Arte de Valladolid, ambos con menos alumnos que el Conservatorio leonés.

Este enésimo retraso, que podría comprometer la intención autonómica de que la nueva sede de La Palomera abra sus puertas en 2021, se suma a los once años en los que la Junta se había comprometido a ejecutar este nuevo Conservatorio de Música en la capital de la provincia, desde que en 2008 el Ayuntamiento de León, bajo gobierno socialista, ya ofreciera el solar de La Palomera.

Para el pasado año 2018, la Junta había incluido en sus presupuestos una partida de 1,5 millones. De ellos, tan sólo gastó los 284.350 euros que constó la redacción del proyecto elegido finalmente, realizado por el Estudio González Arquitectos S.L.P. de Valladolid, encargado también de uno de los últimos conservatorios nuevos ejecutados, el de Ávila.

Pero es que, además, el diseño, tamaño y prestaciones de la nueva sede leonesa nunca gustó ni a la Plataforma Por un Conservatorio Digno para León ni a los muchos colectivos leoneses que secundaron sus quejas, entre otras muchas cosas porque será un 32% más pequeño que el actual edificio ocupado en Santa Nonia, lo que lastrará su crecimiento en el número de especialidades y alumnos, denuncian.

El proyecto prevé un espacio de 4.200 metros cuando la actual sede 'de prestado' por la Diputación suma 6.200 metros o diseña ocho cabinas de estudio para un Conservatorio de hasta 600 alumnos.

Las características previstas

Entre la superficie total construida de 4.244,31 metros se contempla una zona docente, cuya superficie útil será de 2.435 m2, con 48 aulas -siete de formación general, tres de música de cámara, 32 de enseñanza instrumental, una de contrabajo, una de percusión, una de violoncelo, una de orquesta, una de coro y una de informática; y 12 cabinas, cuatro departamentos, una sala de usos múltiples; un auditorio -de 400 butacas-, un almacén del auditorio, dos camerinos, una biblioteca y aseos.

La zona de administración -superficie útil 164 m2- constará de despachos, conserjería, sala de profesores, de orientación, archivo, aseos, etc.; y la zona servicios comunes -superficie útil 240 m2- tendrá tres almacenes -uno para instrumentos-, dos cuartos de limpieza, de telecomunicaciones o contadores.

Para el curso 2017-2018, el Conservatorio leonés sumaba 468 alumnos matriculados -204 de enseñanzas elementales y 264 de enseñanzas profesionales-, e imparte estudios en las especialidades de acordeón, clarinete, clave, contrabajo, fagot, flauta travesera, flauta de pico, guitarra, oboe, percusión, piano, saxofón, trombón, trompa, trompeta, viola, violín, violoncelo y canto.

Ahora, la pelota y la voluntad política de paliar años de incumplimientos con León recaerá en la cartera de la nueva consejera de Educación de la Junta de Castilla y León que preside Alfonso Fernández Mañueco, la soriana Rocío Lucas.

Un nuevo espacio para la Diputación

Y por otro lado, es de esperar que la Diputación leonesa, a partir de ahora gobernada por el PSOE y UPL, busque recuperar cuanto antes el céntrico inmueble de Santa Nonia que en el último mandato se ha seguido cediendo en precario a la Consejería, ya que la institución provincial requiere nuevos espacios administrativos.

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